Supervisar y controlar el estado de 360 kilómetros de red de distribución de gas así como de cuatro estaciones de regulación y siete plantas de almacenamiento de Gas Natural Licuado, repartidos por toda la geografía extremeña, es la principal función del Centro de Control de Gas Extremadura, situado en la sede de esta empresa, en Badajoz.

Este centro es el guardián que vigila permanentemente para dar la voz de alerta ante cualquier incidencia que pudiera surgir. Su trabajo es de vital importancia para garantizar la calidad del suministro a los 96.000 usuarios extremeños que en la actualidad utilizan esta energía, el 40% de ellos para consumo doméstico.

El Centro de Control ofrece información a tiempo real del estado del entramado gasístico de la región a través de un sistema informático conectado a las estaciones remotas situadas en las 14 localidades de la región donde opera Gas Extrema dura. Este sistema, según el responsable de mantenimiento de redes, canalizaciones e instalaciones de la empresa, Luis Carrillo, además de detectar, prevenir y advertir anomalías, ofrece datos sobre niveles de presión, temperatura, estado de las calderas, las bombas, y consumos, que sirven para elaborar informes para planes directores y otros documentos.

Los equipos técnicos de Gas Extremadura "pueden en cualquier momento, y desde cualquier lugar, acceder a cada una de las estaciones o plantas, para lo que sólo necesitan un ordenador portátil y un teléfono móvil", según Luis Carrillo. En una gran pantalla aparecen los esquemas con toda la información de cada una de las estaciones y plantas de gas licuado, "además, todos los sistemas y líneas de suministro están duplicadas para que en el caso de que se produzca un fallo empiece a funcionar el segundo de forma automática".

Luis Carrillo aseguró que estas instalaciones tienen una gran fiabilidad y su mantenimiento es sencillo. En su opinión, el gas natural tiene unos índices elevados de seguridad. El centro recibe alrededor de un centenar de llamadas mensuales de usuarios, pero "la mayoría de las llamadas por fallos o averías son falsas alarmas, motivadas por la falta de información".

El consumo de gas natural, según el director comercial de Gas Extremadura, David Aguilera, se ha incrementado en el 2004 un 12% respecto al ejercicio anterior, por lo que la cantidad ascendió a 870 gigawatios/hora, de los que el sector industrial consumió 672 y el sector comercial 32.

Desde 1998, la empresa ha realizado inversiones por un importe total de 51,5 millones de euros y la inversión aprobada por el Consejo de Administración de Gas Extremadura para el 2005 asciende a 6 millones de euros, que se destinarán a 40.000 nuevos metros de red de distribución e instalaciones complementarias. Se prevé conseguir 6.500 clientes más en la región. Desde el 2003 la empresa obtiene beneficios, debido, sobre todo, a que las inversiones no ya son tan cuantiosas como los primeros años, "con lo que los objetivos previstos para el 2016 de duplicar clientes y redes se podrán alcanzar en el 2008".