Los máximos representantes de los autónomos extremeños han entrado en guerra. La polémica la abrió ayer el secretario de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) de las comarcas Valle del Alagón y San Marcos, Isidro Barroso. Este pidió, a través de un escrito, la dimisión del secretario general de la organización, Luis Fernández Palomino, al que acusa de estafar a los afiliados de la organización.

Barroso asegura que el trato que Fernández tiene con sus afiliados, "bordea la estafa porque ofrece servicios gratuitos a los afiliados y la sorpresa viene después cuando les llega la minuta", asegura. Como ejemplo cita un asesoramiento de abogacía prestado por la organización a un asociado, al que al parecer luego se le ha pasado una minuta de 6.000 euros, explica Barroso.

Este también acusa a Fernández de engañar a UPTA-España. "Esta organización le encarga una encuesta con una subvención de 12.000 euros y la encuesta no se realiza en los términos establecidos y se lleva a cabo por un empleado de UPTA-Extremadura que cobra 600 euros" dice Barroso. Del resto del dinero, nada se sabe.

Entre la gran retahíla de acusaciones también entran en juego los décimos de la lotería nacional de navidad. Barroso explica que dichos décimos llevaban un incremento de 3 euros por boleto oficial y, "este hecho constituye un acto fraudulento puesto que los boletos no eran participaciones ni existía figura de donativo". Y, "por si fuera poco", añade Barroso, Fernández Palomino, "decidió que el dinero de la sobrefacturación se depositara en su cuenta particular".

Luis Fernández negó, ayer, todas estas acusaciones y dijo que a él no le hacen daño, pero, "sí a la organización y a los socios". Y anunció que en los próximos días pondrá una querella criminal contra Barroso, "por falsedades y mentiras".