El joven Darío R. M., de 19 años, evoluciona favorablemente de las lesiones que sufrió junto a un compañero a consecuencia de la explosión de un depósito de combustible de un secadero de tabaco en Navalmoral de la Mata. Darío R. se encuentra ingresado en la planta de Cirugía Plástica del Hospital Virgen de la Montaña de Cáceres y responde bien al tratamiento.
El doctor Salinas, jefe del Servicio de Cirugía Plástica informó ayer a este diario que la evolución del joven "es buena". Darío R. sufre quemaduras de segundo grado en ambos antebrazos, la cara y la pierna izquierda, con una superficie corporal afectada del ocho por ciento.
"Está respondiendo bien al tratamiento, por lo que estimamos que las curas tópicas que se le están aplicando serán suficientes para su curación total", indicó el jefe de Cirugía Plástica. Este matizó que de necesitar intervención quirúrgica será sólo para las heridas que presenta en el brazo izquierdo, "pero se ha decidido esperar hasta el lunes para ver la evolución, será entonces cuando se tome la decisión de operar o no".
El herido más grave, Raúl G. C., de 20 años, que sufrió quemaduras en el 90% de su cuerpo, permanecía ayer ingresado en el hospital madrileño de La Paz, que no facilita información sobre su estado y evolución por expreso deseo de su familia.
