El Carnaval de Navalmoral empezó anoche premiando la crítica a la situación económica que hizo el grupo de murgas y chirigotas Los hipotecaos, pagadnos el premio en metálico que por el banco le tenemos embargao, que se alzó con el primer premio y los 900 euros correspondientes ante más de 3.000 personas presenciaron el concurso.

Con la casa a cuestas, un barril de vino que servía como disfraz, los componentes de este grupo aludieron sobre todo a la crisis económica actual en sus letras: "Y como no podíamos comprar un piso de buen tamaño, hemos comprado un barril, que estamos pagando a 40 años", cantaban.

Los 750 euros, premio del segundo clasificado, fueron para Faratabailes, ganadores de las tres últimas ediciones. La crítica mordaz de sus componentes hizo un recorrido a las noticias locales, nacionales e internacionales. "En este pueblo hace tiempo, y que nadie se me irrite, si queremos ver a Obama ¡nos vamos a la parroquia y allí tenemos a don Felipe!", entonaban sus componentes vestidos de cabareteras.

La peña Semos Diferentes quedó en tercera posición con una canción que hizo un recorrido al pasado de Navalmoral y otra en la que reprobaba varios temas de política local. "Que de un tiempo pa´esta parte, coger el coche es cabrearte, las direcciones cambiadas, las pymes muy mosqueadas, la zona azul ampliada", con párrafos como éstos consiguieron 600 euros.

Cómo está el patio, compuesto mayoritariamente por chicas, quedó en cuarta posición. Y el ranking lo cerraron Los pequeños aficinados.

La crítica no llegó sólo de las peñas, una joven morala en silla de ruedas estuvo las dos horas de actuación de espaldas al escenario y mirando hacia el lugar donde estaba la corporación municipal, reclamando así que el multiusos esté adaptado para los discapacitados. El ascensor que hay no está en funcionamiento.

Antes, Carlos Zamora abrió el Carnaval con un pregón lleno de recuerdos. "Los antiguos fundadores de este pueblo, aquellos que llegaron con sus ganados desde la Sierra de Gredos, nos dieron la cultura, las costumbres y la forma de ser, pero también, nos trajeron esta hermosa fiesta", dijo.

El tío Barragán, el tío Quintín o el tío Juancruz son algunos de los personajes populares de la historia de Navalmoral a los que hizo referencia el que fuera presidente de la Agrupación de peñas durante 12 años.

"No sigo más, ya no puedo, la emoción me desata, yo nací un día en Navalmoral de la Mata". Estas palabras, que parafrasean a un poeta moralo, dieron paso al chupinazo y a las murgas.