La luz es alargada en el patio de vecinos, antiguo cebadero de ventanas tras las que el agua chapotea milagrosa en las fuentes del Parque de San Fernando mientras Badajoz cose los pliegues de esta tarde de mitad de febrero. Le sigue indignando la exclusión, la injusticia, la aberración de la desigualdad social. Pedro Escobar no pierde la sonrisa, ni la mirada serena, ni el miedo a usar la pistola del sentido común y mantener la calma.

--¿Como se vive lejos del ruido y los altares?

--Francamente bien. Recuperando sensaciones, amistades y afectos.

--¿Qué le basta para tocar el cielo?

--Ver que la gente que está conmigo sonríe.

--Nos pasamos media vida deshaciendo nudos cuando lo fácil sería no habernos dejado poner cuerdas...

--Los nudos a los que me enfrenté los elegí voluntariamente, probablemente no sabía lo difícil que sería vivir con ellos, pero fue una opción personal conscientemente aceptada.

--¿Usted es un traidor?

--Creo que no. Hicimos lo que había que hacer y sobre todo lo que me dijeron que hiciera los que yo representaba.

--¿Por qué garantizó el gobierno de Monago?

--Monago ganó las elecciones, es algo que se suele olvidar. Nosotros no le quitamos la presidencia a Vara y se la dimos a Monago, fueron los extremeños. Vara sabe que si hubiera sido la lista más votada habría gobernado.

--¿Estamos asistiendo a la muerte de la socialdemocracia?

--Hace tiempo que la socialdemocracia murió, no sé si murió con Olof Palme o Helmut Schmidt pero hace mucho tiempo que la izquierda se conforma con programas minisocialdemócratas.

--"La progresía es, ni más ni menos, el sumidero por donde se han ido las ideas de la izquierda. La progresía es quedarse en la reforma de una serie de aspectos sociales, como los matrimonios homosexuales o las medidas de discriminación positiva de la mujer, mientras que se deja intacta una realidad económica injusta". La frase es de Julio Anguita...

--Julio, como siempre, se anticipa a su momento y por eso nunca tiene el éxito que debería tener. Se reconoce tardiamente que tenía razón.

--La ola de irregularidades en la gestión del dinero público de dirigentes del PP es un enorme descrédito para un partido que necesita una profunda renovación...

--Sí. Rajoy en este momento es un apestado y la corrupción lo ha deslegitimado para gobernar. Nadie quiere hacerse la foto con él porque resulta difícil creer que no supiera o intuyera todo lo que ocurrió en Valencia o en Madrid.

--¿A usted lo dilapidaron en la plaza pública?

--Sí. Soy consciente de ello, pero desde posiciones deshonestas intelectualmente.

--¿Por qué no pactó con Vara?

--Porque la inmensa mayoría de la base social de IU no quería. Eran 28 años de aguantar al PSOE, con muchos alcaldes caciquiles y con muchos comportamientos dictatoriales. Y decían, de momento no. Quizá hoy, naturalmente, la respuesta sería distinta pero en aquel momento la alternancia suponía higiene democrática para esta comunidad.

--¿Qué es ser coherente?

--Decir lo que se piensa y pensar lo que se dice, aunque te equivoques. Cuando hay dobleces entre el pensamiento y la acción empiezan las incoherencias.

--¿Qué es ser honesto?

--Se parece bastante a ser coherente. No extraer ningún beneficio personal de aquello que haces en representación de otros.

--"Ni izquierdas ni derechas, a España solo puede gobernarla un robot". Lo ha dicho Fangoria...

--Soy más de Ismael Serrano y de Joaquín Sabina.

--¿Qué supone ser de izquierdas?

--Defender lo que interesa a la mayoría, la discriminación positiva hacia los más desfavorecidos.

--Desde finales de los 80, los apoyos del PSOE se incrementaron en los sectores más cercanos a la izquierda, en parte a costa del apoyo a IU...

--Ha sido una especie de maldición. Parecíamos estar condenados a apo-

yar incondicionalmente al PSOE y cuando eso no se hacía, como pasó en Extremadura, ya se consideraba una traición.

--¿Qué fue la pinza?

--Una inmensa mentira, una creación mediática.

--¿Qué es el Campamento Dignidad?

--Tiene dos caras, la de las personas que están en situación difícil y la de quienes lo han utilizado para hacer ruido, el campo de juego en el que han conseguido notoriedad en beneficio propio o de otras opciones políticas.

--¿Esa cara fue la de su escrache?

--Cuando estábamos intentando mejorar la ley de renta básica, por cierto la única comunidad que no tenía esa prestación era Extremadura, y promovimos el cambio de consejero, sufrí dos escraches. Para mí resultó absolutamente incomprensible.

--Describa el Parlamento regional hoy...

--Un pequeño teatro en el que se representan guiones escritos desde más lejos.

--¿Podemos le ha quitado el puesto a Izquierda Unida?

--No. Podemos le está quitando el puesto al PSOE con la construcción de un mensaje polivalente que resulta bien escuchado. En Extremadura no han impulsado ninguna medida que alivie la vida de los extremeños. Han tirado a puerta sin marcar gol. Están haciendo una política vieja que es hablar mucho y hacer poco.

--Ciudadanos dice que ni es de izquierdas ni es de derechas...

--Representa a la derecha liberal europea. Esa derecha que no entra en asuntos de libertades personales o derechos individuales como los matrimonios del mismo sexo, el aborto o el divorcio, pero que en economía, fiscalidad y relaciones laborales son claramente derecha.

--¿Dicen que el PP es el partido de la corrupción, pero tiene 700.000 afiliados. Generalizan?

--Sí. Creo que la inmensa mayoría de la gente que está en los partidos, incluido el PSOE y por supuesto IU, son gente honesta. Lo que pasa es que para hundir un barco solo hace falta uno que haga un agujero.

--¿Sigue patente un guerracivilismo ideológico de la izquierda?

--Creo que cada vez tiene menos espacio el guerracivilismo para la izquierda, aunque sea la reserva espiritual a la que recurre cuando no tiene demasiado argumentos.

--¿Por qué Alberto Garzón infravaloró a Podemos?

--Más bien la dirección que tenía entonces Izquierda Unida: Cayo Lara, Willy Meller, Miguel Reneses lo infravaloraron apoyándose en unas encuestas.

--Los aparatos no se involucraron en los procesos de refundación. ¿Es el mayor error de IU?

--No supimos leer el momento sociológico que surgió con el 15-M. Fue una falta de visión por nuestra parte.

--¿El Rey entiende que hay que modificar la Constitución?

--Sí, modificaciones que no afecten al título Segundo.

--No permitió la refinería...

--Hubiera sido en los últimos 50 años la única refinería de interior que se ponía en Europa Occidental. Técnica, económica y medioambientalmente no era viable y desde el principio el PSOE lo supo. Sabían que había un informe de impacto ambiental hecho por sus técnicos.

--¿Las cosas van mejor en Extremadura ahora?

--Da la impresión que ahora es el paraíso, pero siguen el paro, Acorex, Caja Rural, el retraso en el pago de la renta básica y no pasa nada. Están intentando poner en marcha un protocolo para desahuciar a personas que ocupan viviendas. Eso IU no lo hubiera permitido. Antes le hacían escraches a Pedro Escobar y en cada pleno había un grupo de ciudadanos y se montaba la gran bronca, ahora no. Ojalá sea porque los problemas sociales se han resuelto pero creo que es porque los aliados sociales que tiene el PSOE no son los que tenía el PP ni por supuesto los que nos adjudicaron a nosotros como sostenedores del PP. Eso lo hemos sufrido nosotros: no tener gente en la calle que explicara lo que hacíamos.

--¿Entonces cree usted que al PSOE se le perdona todo en Extremadura?

--No es que lo crea, es que lo veo. Ahora mismo van a recortar escuelas rurales. Imagino que hace un año se hubiera vendido como aquello de "van a acabar con la escuela rural, ustedes están destruyendo la escuela pública". Ahora se vende como el resultado de la racionalización. Como hay menos niños, ahora hay que cerrar las escuelas. Dicen que van a cerrar solo 30; claro, 30 este año y 30 el que viene. Lo que para unos sería una bofetada, para otros es un sacrificio comprensible.

--Pero los resultados electorales hablaron y les juzgaron...

--Mediáticamente éramos los que estábamos apoyando a Monago: cayeron sobre nosotros todos los cristales rotos.

--¿Y en qué acertaron ustedes?

--En las políticas sociales.

--¿Y en qué falló el PP?

--En las prioridades. Monago se equivocó en algunas cosas, quizá puso demasiado ímpetu en eso de los emprendedores, la nueva economía. Se equivocó en el diálogo social, en las políticas sociales, porque la gente tiene que comer, tiene que pagar el agua. Y si no tiene que hacerse el AVE pues no se hace, rodaron a piñón fijo con lo que había y pagaron también en buenas consecuencias el hundimiento general de la economía. No pienso que el PP sea una manada de malvados que querían putear a la gente. Ni el PP ni el resto de partidos. Eso no se sostiene. Pensaron que tendrían más tiempo para cambiar una estructura muy subvencionada y no lo tuvieron.

--Pero con el Senado toparon...

--Los viajes a Canarias forman parte de la hipocresía social. Revelaban un abuso global del Senado que nadie quiso airear.

--¿Usted se sintió desacreditado por sus propias filas?

--No, yo tuve incluso más respaldo que Pablo Iglesias en Podemos. Pero había un problema de respeto democrático de la minoría respecto a la mayoría, deslealtades internas y fracaso democrático de quien no sabe estar en minoría. Es increíble que en las organizaciones de los escraches en mi casa estuviera gente de IU Badajoz. El objetivo era romperle las piernas a Pedro Escobar, y no se las han roto ni se las van a romper.

--Y al final se ha marchado...

--Aun estando en el hemiciclo me hubiera ido. Me hubiera gustado marcharme con tres o cuatro diputados en la Cámara porque la nueva política que cambiaría el país sería aplicar el programa de IU. Pero no pudo ser. Faltaron solo 914 votos.