La huelga de las salas de cine dividió ayer a los empresarios del sector en Extremadura. La iniciativa, convocada por la Federación de Cines de España (FECE) para protestar contra el anteproyecto de Ley de Cine, contó con el respaldo de cuatro salas extremeñas (una en Badajoz, dos en Cáceres y una en Mérida) y la oposición de otras tantas (las de Plasencia, Almendralejo, Don Benito y Zafra).
Por su parte, los Multicines Puente Real de Badajoz también permanecían ayer cerrados pero, en este caso, por descanso del personal. De este modo, la repercusión en la comunidad extremeña de un paro organizado a nivel nacional puede considerarse limitada, como consecuencia del empate que se produjo entre los seguidores y detractores del mismo.
Argumentos del sector
Empate que, en cierto modo, se extiende también a los argumentos utilizados para defender cada una de estas dos posiciones. De un lado, los partidarios del sí , encabezados por la FECE, que justifican el cierre "como señal de protesta ante una situación de falta de negociación total y falta de reconocimiento en la tramitación inicial del Proyecto de Ley --de Cine--". Su objetivo: "que se tengan en cuenta algunas de las demandas históricas del sector: cuota de pantalla, ventanas de explotación y situación con las majors de Hollyvood".
Pero estos argumentos se quedan demasiado lejos para algunos empresarios extremeños. Es el caso de Matías Villegas, gerente de los Multicines Victoria, que gestionan las salas de Almendralejo, Don Benito y Zafra. En su opinión, "los motivos para convocar esta huelga no están claros, supuestamente es para presionar al Gobierno de cara a la nueva Ley de Cine y para que haya más inversiones en el sector, pero nosotros nos sentimos un poco al margen de estas reivindicaciones".
Más tajantes se muestran los responsables de los Multicines Alkázar, de Plasencia, con los que este diario contactó el pasado sábado para conocer su postura ante la huelga de ayer. "Nos parece que esa convocatoria es más bien para los grandes negocios, que pueden permitirse el lujo de cerrar y quedarse sin ganancias", manifestaron dichas fuentes. Por tanto, las salas placentinas permanecieron ayer abiertas en sus horarios habituales.
Como ejemplo de la postura contraria, los Multicines Cáceres, pertenecientes al grupo Van Dyck, se sumaron ayer a la protesta de la FECE, con objeto de que el Congreso de los Diputados escuche "las reivindicaciones del sector". En este sentido, la empresa quiso desmarcarse, a través de un comunicado remitido a este medio, "de las posibles interpretaciones partidistas" de dichas peticiones, pero a la vez afirma que "frente al apoyo que reciben en la ley los productores, los exhibidores reciben el castigo de fuertes multas por incumplimiento de la cuota de pantalla".
Respuesta de la ministra
Pese a estas reivindicaciones, la ministra de Cultura, Carmen Calvo, manifestó ayer en Barcelona que sería "una incongruencia" querer fomentar y proteger el cine español y quitar la cuota de pantalla que, según recordó, "existe desde los años 40", informa Europa Press. Además, la ministra hizo un llamamiento al consenso de todos los sectores, lo cual no equivale a que consigan el 100% de las reclamaciones, sino que "todos consiguen algo y renuncian a algo", puntualizó. Y es que también los actores manifestaron ayer su deseo de ser reconocidos como creadores" en la nueva norma, cuya aprobación parece de momento complicada.
