El presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, reclamó ayer confianza en los políticos, que son los únicos "capaces de dar respuesta a las demandas sociales", en el que será su último discurso institucional de fin de año. La intervención abordó también cuestiones como la identidad y los tópicos sobre la región. Desde la oposición, el portavoz del PP, José Antonio Monago, apuntó que ha sido "el discurso de la resignación", mientras que el coordinador de IU, Víctor Casco, tachó el mensaje de "absolutamente hipócrita".

Ibarra comenzó su alocución recordando que "éste será mi último mensaje navideño" como presidente y apuntó que el 2006 se ha caracterizado por "mucho jaleo" debido a las reivindicaciónes de la identidades regionales. El presidente del Ejecutivo extremeño se refirió a la necesidad de desterrar ópicos "y hacer un ejercicio de confianza en nosotros mismos". En este punto, Ibarra demandó "confianza en los políticos y en la política", ya que "sin ellos los pueblos no avanzarían". Por eso incidió en cuestiones como que los más jóvenes afirmen que pasan de la política, "pero reclaman trabajos fijos y viviendas asequibles".

Más adelante reiteró que Extremadura recibirá 3.400 millones de la UE en el periodo 2007/2013, pero añadió que aunque fuese menos, "ya no dependemos de Europa", porque lo significativo son "los recursos que generamos los extremeños y los españoles" que, aseguró, sumarán 42.000 millones.

En la parte final, Ibarra agradeció la colaboración que en estos años le han prestado muchas personas "independientemente de su ideología". También reconoció que ha tenido "que romper algunos cristales para que el resto de España supiera que estamos aquí". En todo caso, pidió disculpas "si ofendí a alguien", aunque añadió que en ciertos casos su intención fue molestar, como cuando se pretendió identificar "a todo un pueblo" con los sucesos de Puerto Hurraco

CRITICAS DE LA OPOSICION Desde el PP, Monago aseguró que el discurso fue "apagado y sin brillo", y agregó que el avance de Extremadura se ha debido al tesón de los extremeños "pese a las trabas que la Junta ha puesto al desarrollo de la región". Según Monago, el presidente de la Junta se marcha "aburrido" de la política extremeña.

Mientras, el coordinador regional de IU, Víctor Casco, aseguró que el discurso de Ibarra fue "de autojustificación", y que "sólo ha hablado del pasado y de sí mismo".