El presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, reiteró ayer su deseo de constituir en Extremadura un grupo cooperativo único "capaz de producir, transformar y quedarse con el valor añadido" y en el que se integren todos los agricultores y ganaderos. Rodríguez Ibarra lanzó su deseo en Granja de Torrehermosa, donde inauguró la planta industrial de transformado integral del cerdo Acosierra.

En su intervención, animó a Acorex a que sean capaces de impulsar, junto con otros grupos, esa gran cooperativa "para hacernos grandes y para ser competitivos con el resto". Añadió que en la actualidad la región está "en el camino de lograrlo".

Según informa EP, el presidente determinó que la agricultura está experimentando importantes transformaciones y la actitud ante el mundo agrícola no puede ser la de hace veinte años. Reconoció que el agricultor queda en inferioridad cuando el producto se vende por una "diferencia notable" entre los precios de origen y de destino. Por este motivo, Ibarra animó a los sindicatos agrarios a que "además de quejarnos hagamos posible que esa diferencia se quede con ella el agricultor, formando parte de un grupo cooperativo capaz de producir, transformar y quedarse con el valor añadido, que es lo que todavía le falta a la región extremeña".

Así, el jefe del Ejecutivo se mostró "seguro" del "futuro sólido" de Acosierra, porque cuenta con el respaldo económico de Acorex, "segundo grupo en facturación en la región en poco más de veinte años" y porque se dedica al sector, el de la transformación del cerdo ibérico, en el que Extremadura es puntera, "líder mundial".

Acosierra ha supuesto una inversión de 14 millones de euros y la creación de 40 empleos directos que se prevén aumentar a 60 en los próximos años. La fábrica, que ocupa una superficie de 13.200 metros cuadrados, está inicialmente diseñada para procesar 45.000 cerdos cada año.