Iberdrola tiene planeado construir una central eléctrica de ciclo combinado de gas en la comunidad extremeña a partir del año 2006, una vez finalizado su plan estratégico actual, según han confirmado a EL PERIODICO EXTREMADURA fuentes de la compañía, que celebró ayer su junta de accionistas en Bilbao.

La empresa, que ya ha determinado cuáles son los emplazamientos más óptimos, estima que es necesario poner en marcha nuevas centrales generadoras de electricidad para hacer frente a los elevados consumos que se prevén en España a medio plazo.

Los datos que maneja el grupo apuntan a que, con las inversiones en generación vigentes, el suministro y la calidad de éste están garantizados hasta el 2011. Pero antes de esa fecha hay que construir nuevos emplazamientos energéticos para producir electricidad y ahí es donde va a seguir jugando un papel importante la región extremeña. Aunque este multimillonario proyecto para Extremadura todavía está en fase embrionaria, la decisión empresarial está ya tomada.

La potencia y dimensión de las nuevas instalaciones aún no están decididas, aunque la última central de ciclo combinado inaugurada este año por Iberdrola, concretamente en Castejón, ha requerido una inversión de 170 millones de euros.

La multinacional británica International Power tiene un proyecto más avanzado para construir una instalación de características similares en la región. En este caso, los planes se disparan hasta los 300 millones de euros. De llevarse a efecto, representaría la mayor inversión industrial ejecutada en Extremadura en los últimos veinte años, concretamente desde la Central Nuclear de Almaraz.

CIFRAS BASICAS

Precisamente, en la última junta de accionistas se ha puesto de manifiesto el liderazgo que Iberdrola alcanzó al cierre del 2002 en España tanto en plantas de ciclo combinado como en energías renovables, así como en los mercados liberalizados de electriciddad y gas, según destacaron el presidente y el consejero delegado del grupo, Iñigo de Oriol e Ignacio Sánchez Galán.

La compañía, que cuenta con 292.000 clientes en Extremadura, cerró el ejercicio 2002 con un beneficio neto de 962 millones de euros, un 6,3% más que el precedente. La cifra de negocio ascendió a 9.594 millones de euros, con un incremento interanual del 17,8%.

Pero por encima de estas magnitudes la compañía resalta que durante el año pasado realizó el mayor esfuerzo inversor de su historia: 2.650 millones de euros, un 45% más que en el 2001, reduciendo su deuda y su nivel de apalancamiento al 57,1%.

Con respecto a los apagones, que han ocasionado quejas puntuales en la provincia de Cáceres en los últimos tiempos, Iberdrola defiende que a lo largo del 2002 ha conseguido mejorar un 16% la calidad del suministro, situándose en un tercio por encima del nivel medio de servicio que ofrecen las empresas del sector y consiguiendo que el nivel de disponibilidad se haya situado en su ámbito de influencia en el 99,98%.