La industria, la agricultura, el comercio o el turismo extremeño ofrecen unas perspectivas de negocio distintas que intentan explotar los emprendedores de la región, que son capaces de crear empresas que elaboran desde pastillas efervescentes para automoción y limpieza en general, hasta el primer vivero para cultivar setas comestibles en árboles y arbustos, pasando por detectores de metales para graveras. Todas estas alternativas con un elemento común: la imaginación al servicio empresarial.
Son algunas de las iniciativas innovadoras que han sido premiadas por el programa NEEx (Nueva Empresa Extremeña), de la Junta.
No se trata de generar grandes empresas --ninguna creará más de diez empleos ni cuentan con inversiones millonarias-- sino que buscan potenciar las posibilidades que les ofrece su entorno. Este año además, el Ejecutivo ha querido premiar con mil euros al proyecto joven más novedoso, que ha sido para Innaper, que fabrica en Zafra innovaciones de aluminios para persianas con apertura horizontal; y otros mil euros para una iniciativa hecha solo por mujeres, que ha sido para Pámpano Vinatería, en Almendralejo, y que aporta nuevas técnicas de conservación del vino.
Un albergue en el Jerte que recrea una aldea medieval, baños árabes, una cosechadora de fresas, un servicio para recoger documentos contenidos personales, y un servicio de interpretación de lengua de signos son otras iniciativas premiadas.
