Los agentes forestales siguen trabajando esta mañana en la extinción del incendio de la sierra de Hervás que ha arrasado unas 300 hectáreas desde la tarde del viernes. No obstante, el nivel de peligrosidad ha sido rebajado de uno a cero, según confirmaron a Europa Press fuentes del Gobierno regional.
El fuego se declaró alrededor de las ocho de la tarde del viernes en la sierra de Hervás. El alcalde, Sergio Pérez, se muestra convencido de que fue provocado. Además, aseguró que el paraje afectado es una zona "privilegiada, de gran valor ecológico en la que había matorral, robles y pinos". No obstante, se congratuló de que el incendio no haya afectado a la zona donde se encuentra el segundo bosque de castaños más importante de Europa.
El edil de Hervás indicó que numerosos vecinos se habían ofrecido voluntarios para colaborar en la extinción del fuego. "La gente de mi pueblo, en cuanto pasa algo en la sierra, se echa a la calle, dispuesta a subir a apagar el fuego", explicó. No obstante, la decisión de los agentes forestales fue que no era necesario que ayudaran porque tenían controlada la situación y era mejor no correr riesgos. "Me siendo orgulloso de un pueblo así", dijo Sergio Pérez.
En la extinción del incendio han participado dos hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente, cinco camiones de bomberos del Plan Infoex de la Junta de Extremadura y del Sepei, así como retenes de tierra de las comarcas próximas (La Vera, Valle del Jerte y Las Hurdes).
Pérez agradeció además la colaboración prestada por bomberos, Guardia Civil, Subdelegación del Gobierno en Cáceres, Diputación Provincial, Junta de Extremadura, concejales de Hervás, Policía Local y Protección Civil de esta última localidad y el Ministerio de Medio Ambiente.
FUEGO EN TORREMENGA
Esta localidad verata fue escenario del segundo incendio de ayer. "Cuando me di cuenta estaba todo ardiendo, con las llamas junto a mi casa". Así describió la situación que vivió en la mañana de ayer uno de los propietarios de las dos viviendas que se vieron prácticamente envueltas en llamas, debido al fuego que se declaró en torno a las 12 en el límite de los términos municipales de Torremenga y Jaraíz, junto al paraje conocido como El Pasil.
Se quemó un depósito para agua que tenía en el exterior del inmueble, lo que en los primeros momentos provocó una gran humareda negra, visible desde localidades más alejadas, como es el caso de Aldeanueva de la Vera. A circunstancias parecidas se enfrentó el dueño de otra de las viviendas habitadas que hay en el entorno, aunque este último no se encontraba en la vivienda, que quedó totalmente rodeada por el fuego, cuando se originaron las llamas, que además se quedaron a muy pocos metros de la Casa Rural la Casona y los bungalows que hay situados junto a esta última.
En ambos establecimientos se encontraban alojados turistas que también se vieron sorprendidos por el fuego. Afortunadamente, no hubo que lamentar daños personales.
En la extinción del incendio participaron dos camiones de bomberos del Sepei, con base en Navalmoral de la Mata, dos helicópteros y agentes de la Guardia Civil. La superficie calcinada se sitúa en torno a las veinte hectáreas de pasto y jaras, según los cálculos que manejaban pasadas las dos de la tarde varias de las personas que estaban en la zona del siniestro, entre las que se encontraba el alcalde de Jaraíz, Bonifacio Sánchez.
