El Programa de Cría en Cautividad del Lince Ibérico, que se desarrolla en cinco centros repartidos por la Península, uno en Cáceres, cierra su primera década de actividad, entre 2005 y 2015, con un índice de supervivencia de nuevos cachorros del 72,4%. Ello significa, según los datos del Programa Lynx ex situ, que de los 333 cachorros que han nacido en la primera década de vida del mismo, 241 han superado los 60 días de vida, lo que implica que pueden contribuir a seguir prolongando la actividad del programa o a la reintroducción de la especie al medio natural.

Para llegar a estas cifras, durante estos diez años se ha producido el emparejamiento de 202 hembras, de las que han copulado 164, el 81,2%. Ello ha supuesto que quedaran gestantes 130 hembras, lo que supone el 79,3% de las emparejadas, obteniéndose una media de camada de 2,6 ejemplares por cada una.

Esta primera década de actividad se cierra con la liberación o suelta al medio natural de un centenar de ejemplares, causando baja 35 de ellos, un 19,16%. En la actualidad hay cinco centros de cría en cautividad del lince ibérico repartidos por la Península Ibérica: El Acebuche, en Doñana (Huelva), La Olivilla (Jaén), Zoobotánico de Jerez (Cádiz), Silves (Portugal) y Granadilla (Cáceres). Todos están preparados ya para el desarrollo de la nueva temporada de cría 2016 en la que se van a emparejar un total de 24 hembras, algunas de las cuales, como es el caso de una en El Acebuche, ya incluso han registrado sus primeras cópulas.