Las últimas cifras sobre la Inspección de Trabajo en Extremadura reflejan que los inspectores realizaron el pasado año 28.767 actuaciones, casi 1.400 más que en el 2005. Fruto de esa labor, detectaron 3.628 infracciones (300 más que un año antes), pero, pese a la mayor incidencia, el importe de las multas ha pasado de 4,8 a 3,5 millones de euros. Además, el número de trabajadores afectados ascendió a 7.064, medio millar más que un año antes.

Las visitas a los centros de trabajo han provocado más de 2.000 altas en la Seguridad Social en los últimos dos años, y que 3.100 personas hayan pasado de tener un contrato temporal a uno indefinido.

Cada día, los encargados de velar por la legalidad en las empresas detectan una media de diez actuaciones fraudulentas en los centros de trabajo de la región, con una sanción media que apenas llega a 1.000 euros.

En materia de inmigración, los inspectores destaparon el pasado año 165 casos fraudulentos.