El Instituto de Finanzas de Extremadura que ya fue anunciado por el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, no estará operativo hasta finales del presente año, según avanzó ayer el consejero de Administración Pública y Hacienda, Angel Franco. En una comparecencia para analizar la actividad de su departamento en el último año y avanzar las líneas de actuación del presente, apuntó que se está trabajando en la definición de la entidad jurídica y la forma de actuar de este banco de segundo escalón que tiene la función de ayudar a los proyectos empresariales que, siendo viables, no consiguen la financiación necesaria para su desarrollo por parte de los bancos y las cajas de ahorro.

Franco dejó claró que el Instituto de Finanzas, del que avanzó que no necesariamente tendrá capital exclusivo público, no será un banco y que, por tanto, no captará pasivos. Su papel será apoyar proyectos empresariales "viables, bien diseñados y bien gestionados" que no obtienen financiación debido a que "necesitan de mayores garantías o no pueden asumir todo el riesgo que demandan las empresas".

El consejero asegura que este instrumento de apoyo a la financiación "no llega tarde", aunque reconoció que en épocas de "vacas flacas" como la actual es cuando se hace más evidente su utilidad. Según dijo, no es una medida que haya surgido por la crisis, puesto que su departamento lleva trabajando en su puesta en marcha desde hace más de un año, por lo que este instituto también jugará un importante papel en el sistema financiero extremeño en el futuro, como ya han demostrado hasta la fecha las entidades de similar naturaleza que vienen actuando en otras comunidades autónomas. De hecho, además de esta función de "hacer bancables determinados proyectos de inversión que ahora no lo son", tendrá otros encargos. Entre ellos actuar como interlocutor de la región ante otros organismos de crédito, como son el banco Europeo de Inversiones, o el Instituto de Crédito Oficial.

Por tanto, esta figura tendrá la misión de aportar "un poco más" a la labor de impulsar el desarrollo económico de la región que hasta ahora tienen encomendadas la Sociedad Extremeña de Garantía Recíproca y Avales (Extraval) y la Sociedad de Fomento de Extremadura (Sofiex). Franco subrayó que con independencia de dicho instituto la Junta sigue explorando posibilidades que permitan la financiación de proyectos viables en la comunidad. "No hay nada ahora que podamos hacer que no podamos hacer sin que exista el instituto", declaró Franco.

Por otro lado, el próximo miércoles el presidente de la Junta se reunirá con las entidades financieras que suscribieron un convenio con la Administración regional según el cual las cajas de ahorros y bancos firmantes se comprometían a flexibilizar la concesión de créditos a cambio de que en ellos se depositaran 100 millones de euros procedentes del Banco Europeo de Inversiones, con el objeto de mejorar su liquidez.