El Ministerio del Interior se incautó el año pasado de casi dos mil pastillas de drogas de diseño en la región, mientras que el total de sustancias estupefacientes intervenidas superó los 250 kilos, casi todo de hachís. Si hubiesen llegado al mercado estos productos ilegales habrían alcanzado un valor de alrededor de 1,5 millones de euros (250 millones de pesetas).

Las operaciones antidroga de la Guardia Civil y la Policía Nacional permitieron recuperar el año pasado más de 250 kilos de droga, además de otros 208 kilos de plantas de cannabis, según datos del Ministerio del Interior. A estas sustancias estupefacientes hay sumar un total de 1.931 pastillas de las denominadas drogas de diseño en sus diferentes formas. Además, los investigadores también localizaron 439 pastillas de psicotrópicos y fármacos como anfetaminas, ansiolíticos, barbitúricos y otros fármacos que suelen utilizarse en el tratamiento de diversos trastornos psicológicos.

Para comprender la importancia de estas operaciones hay que tener en cuenta que suponen que prácticamente se ha duplicado la incautación de pastillas de éxtasis --son la mayoría de las drogas de diseño-- en un sólo año. Además, las intervenciones de hachís, que continúa siendo la droga más común (en España se incautaron toneladas de esta sustancia), también ha aumentado significativamente hasta alcanzar un volumen histórico de 245,7 kilos.

COMPARATIVA

En el caso de la cocaína y la heroína, la primera continúa ganado terreno a la segunda, aunque aún no la ha llegado a superar. Grifa, marihuana y LSD (los denominados ácidos) son las otras drogas que la Policía y la Guardia Civil lograron recuperar a lo largo del año pasado en la comunidad, enclavada en una de las principales rutas de paso utilizadas por los narcotraficantes.

Los golpes policiales a las redes dedicadas al tráfico de drogas también tuvieron un importante efecto económico sobre estas bandas organizadas. Y es que si los estupefacientes incautados hubiesen salido a la venta podrían haber alcanzado un valor que ronda el millón y medio de euros, es decir, 250 millones de las antiguas pesetas.