Un total de 32.549.792 euros han sido invertidos en la última década en Extremadura en investigación en biotecnología, según el informe "La relevancia de la biotecnología en España 2011", un documento elaborado por la Fundación Genoma España.

De estos fondos, 21,2 han sido aportados por la Administración central y 11,2 por la autonómica.

En el conjunto del país, el País Vasco y Andalucía son las autonomías que más han invertido en investigación en biotecnología en la última década, mientras que Cataluña y Madrid son las regiones que más fondos han recibido de la Administración Central.

Esta es una de las conclusiones recogidas en el informe "La relevancia de la biotecnología en España 2011", un documento elaborado por la Fundación Genoma España, que analiza la importancia científica, económica, empresarial y social de la biotecnología española, su evolución desde 2000 y su comparación con otros países.

Según este estudio, las aportaciones del Estado (Ministerios de Ciencia e Innovación y de Sanidad) a la biotecnología realizadas entre 2000 y 2010 representan aproximadamente el 75 por ciento de la subvención total recibida por cada región, mientras que las administraciones autonómicas aportaron un 24 por ciento y la UE entre el uno y el dos por ciento restante.

Así, entre 2000 y 2010, las principales beneficiarias de la financiación estatal han sido Madrid, Cataluña, Andalucía y la Comunidad Valenciana.

De hecho, sólo entre Madrid y Cataluña absorbieron casi el cincuenta por ciento del total de fondos públicos dedicados por el Estado a la biotecnología, seguidas de Andalucía, con un 18 por ciento, aproximadamente.

Con un presupuesto medio del cinco por ciento cada año están el País Vasco, Galicia, Murcia, Valencia, y Castilla y León, mientras que todas las demás recibieron menos del dos por ciento de los fondos estatales.

Desde la óptica de las comunidades autónomas, las que más fondos aportaron a la biotecnología fueron el País Vasco y Andalucía, con inversiones para el periodo 2000-10 de entorno a 200 millones de euros cada una, seguidas por Madrid, Galicia y Cataluña, que destinaron entre 50 y 100 millones.

El informe advierte de que la inversión de los gobiernos tanto nacionales como regionales por fomentar la biotecnología (la ciencia y la tecnología aplicada a organismos vivos), es un "excelente indicador que permite prever la posible evolución de esta ciencia.

Si este razonamiento es cierto, hay que preocuparse porque las subvenciones y los créditos públicos a la biotecnología en España se sitúan en niveles cada vez más bajos.

Así, después de que en 2007 el Estado dedicase la cifra récord de 589 millones de euros (un 400 por ciento más que en 2000 y un 58 por ciento más que en 2006), en 2008 el Gobierno rebajó la inversión hasta 507 millones de euros, para aumentarla a 565 millones en 2009 y volver a reducirla drásticamente hasta 467 millones en 2010.