El IPC sube en la región un 5,2% en un año, dos décimas más que la media

Entre los productos que más han contribuido a subir el índice se sitúa de manera destaca el carburante. En los últimos doce meses ha experimentado un alza del 24,6%, en una carrera que parece no tener límite, puesto que sólo en los primeros seis meses del 2008 los precios se incrementaron un 17%. También es destacable la subida de la leche, casi un 21% en doce meses, aunque aquí la tendencia parece ir hacia abajo, ya que en los últimos seis meses el precio ha caído casi un 6%.

Con alzas no tan fuertes pero también muy por encima de la media de la inflación en Extremadura se situarían las frutas (11,3% de incremento), cereales y pan (casi el 11%), conservas de hortalizas (subida del 12%). Además, es de destacar que salvo el pan, que en este 2008 parece haber contenido su tendencia alcista, otros alimentos básicos le han tomado el relevo en la carrera inflacionista, como es el caso de las frutas, que acumulan en seis meses una subida del 7%, o las patatas, cuyo precio se ha incrementado entre enero y junio en más del 18%.

REACCIONES Ante este panorama, la vicepresidenta segunda y consejera Portavoz, Dolores Pallero, indicó que la Junta ya esperaba un mal dato debido a la huelga del transporte por carretera. Indicó que la tasa es especialmente desfavorable al producirse un alza en una situación de crisis que perjudica a las familias, aunque aseguró que el Gobierno extremeño ya trabaja para paliar la situación, que, en todo caso, matizó, afecta a toda España.

Por parte del PP, su portavoz parlamentario adjunto, Luis Alfonso Hernández, atribuyó la situación la incapacidad de los gobiernos socialistas para afrontar la crisis, y reclamó de nuevo al presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, que acepte la propuesta popular de reducir los impuestos y establecer una ley de márgenes comerciales.

Hernández indicó que al Gobierno regional le falta voluntad para utilizar el margen de maniobra del que dispone.

Desde los sindicatos, CCOO-Extremadura calificó el alza de precios de "injustificable y gravísima" y señaló que penaliza sobre todo a las rentas más bajas y a todos los trabajadores. Por ello, este sindicato reclamó una acción decidida para evitar la especulación "sobre todo en el sector de la distribución de alimentos".

A juicio de CCOO, es la especulación en los canales de distribución y no la subida del petróleo la que explica la diferencia del IPC de España y Extremadura con la UE. Tras calificar la inflación como "el impuesto más injusto para la ciudadanía", exigió al Gobierno políticas como robustecer la protección social y garantizar las subidas de las pensiones, así como garantizar el poder adquisitivo de los trabajadores.

Mientras, UGT-Extremadura calificó la situación de "explosión inflacionista", y mostró su preocupación ante un problema persistente que "lastra nuestra economía y deteriora la capacidad de compra del ciudadano". El sindicato recordó que Extremadura no conocía niveles de inflación parecidas desde hace 14 años.

Este sindicato atribuye la subida a cuestiones coyunturales como la huelga del transporte y a choques externos provocado por el incremento del petróleo y de determinadas materias primas por el desajuste a nivel mundial entre oferta y demanda. En el ámbito español, denunció las debilidades del sistema productivo y la poca transparencia de los sistemas de fijación de precios. Como CCOO, UGT también reclama claúsulas de revisión salarial en los convenios.

El dato del IPC conocido ayer sitúa a Extremadura, en tasa interanual, en el grupo de regiones con más inflación, junto a Castilla-La Mancha, Aragón, Canarias, Cantabria, Galicia, Castilla y León y Asturias, todas ellas por encima del nivel del 5% de alza del IPC nacional.