La médico extremeña Antonia López González, que trabaja desde hace una década en la asociación Comité Ipiranga, en Africa y Brasil, considera necesaria la unión de todas las organizaciones humanitarias que trabajan en favor de la sanidad de los países pobres para poder acometer entre todas proyectos más ambiciosos.

López, que dirige este colectivo promovido hace diez años por un grupo de jóvenes extremeños, ha dicho en Cáceres que, gracias a los convenios que tienen suscritos con organizaciones internacionales públicas y privadas de Brasil e Italia, Ipiranga trabaja con el objetivo de prevenir, diagnosticar y tratar las enfermedades tropicales más frecuentes.