El coordinador regional de IU, Pedro Escobar, denunció ayer "la sorprendente coincidencia en el tiempo de una serie de maniobras y actos de acoso, intimidación e insultos anónimos en diferentes pueblos donde IU tiene la alcaldía". Estos pueblos son Torrejón el Rubio, Campillo de Llerena, Trasierra, Higuera de la Serena y Llera. El coordinador de IU estuvo acompañado en la comparecencia ante los medios de la alcaldesa de Trasierra, el alcalde de Torrejón el Rubio y el teniente de alcalde de Higuera de la Serena.
El hecho de que estos actos vandálicos y de acoso se hayan producido de manera anónima "nos preocupa enormemente", según Escobar, "porque dificulta la posibilidad de denuncia y de identificación de los culpables". Aún así, el líder de IU anunció que en los próximos días mantendrá una reunión con el delegado del Gobierno en Extremadura para explicarle lo sucedido en estos pueblos, mostrarle pruebas y "pedir amparo para que los cargos públicos de IU, y de cualquier lugar, ante estos actos semimafiosos".
Esther Nieves, alcaldesa de Trasierra, indicó que desde que tomó posesión del cargo ha sufrido, primero llamadas amenazantes que ya no se producen y que se realizaron desde una cabina pública, como agresiones a su coche y pintadas insultantes. Nieves desconoce quién o quiénes pueden ser los responsables de estos hechos.
Miguel José González, alcalde de Torrejón el Rubio, relató "los 18 meses francamente complicados" que lleva al frente del ayuntamiento. González explicó cómo ha sufrido dos intentos de agresión física, la primera el día que tomó posesión de su cargo, además de amenazas, llamadas intimidatorias, actos vandálicos en su domicilio, incluso en una ocasión "metieron papeles ardiendo por debajo de la puerta de mi casa", con el agravante de que vive con su abuela de 86 años. Además, es frecuente que "me echen aceite usado en la puerta o chinchetas para que caigamos mi abuela o yo".
Por último, Manuel Tamayo, teniente de alcalde de Higuera de la Serena, aseguró que el anterior equipo de gobierno del PSOE "no ha aceptado la legitimidad de nuestro gobierno" en el ayuntamiento, a pesar del apoyo patente de los ciudadanos, donde hay más de 110 voluntarios que colaboran con el consistorio en tareas necesarias para el pueblo. Tamayo exculpa al PSOE de los insultos y pintadas que sufren alcaldes, concejales y sus familiares, pero les acusa de "crispar la vida política" de la localidad.
