No podía ser de otra manera. Fieles a la extensa trayectoria de la región como productora de jamón ibérico y a su denominación de origen, Dehesa de Extremadura, los extremeños son los españoles que "más y mejor" conocen este manjar. Así se desprende de un estudio elaborado por la Asociación Interprofesional del Cerdo Ibérico (Asici) sobre la percepción de este producto, con el objeto de poner en marcha un plan para acercar el jamón ibérico al consumidor y divulgar sus beneficios nutricionales entre los profesionales médicos.

El 90% de la población afirma conocer la diferencia entre el jamón ibérico y el serrano, y es que "los extremeños llevan el jamón ibérico en la sangre", resume el estudio. Cerca del 40% de los encuestados en la región conoce las diferencias entre los diferentes tipos de ibérico que se comercializan en España, muy por encima de la media nacional, ya que en muchos casos, existe confusión entre el tipo de jamón, su origen, denominación e incluso la marca.

Consumimos más en casa

Es por ello que disfrutan de lo bueno principalmente en el hogar y no necesitan una ocasión especial para degustarlo, aunque el 48% lo hace siempre en Navidad. Es otra conclusión del informe, que asegura que se consume en casa una media de cuatro meses al año y casi diez veces al mes. También lo degustan fuera, pero en menor medida, un 50% por encima del promedio nacional. ¿El mejor momento del día para disfrutar de un ibérico? El aperitivo, según el 47% de los consultados, seguido de la cena, aunque el desayuno cada vez gana más adeptos.

Y es que cada extremeño consume al año más de dos kilos de productos ibéricos, la mitad corresponde a jamón, frente a los 0,84 kilos en el resto del país, según los últimos datos del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.

La excelencia del jamón ibérico, que los extremeños suelen comprar en fabricantes y tiendas gourmet, no es fruto únicamente de su exquisito sabor. Ocho de cada diez encuestados en la región aseguran que es, con mucha diferencia, mejor que cualquier otro curado. Y es que hay unanimidad (99%) al afirmar que se trata de un alimento sano. "Riquísimo", "muy apetecible" y "muy saludable", son solo algunos de los piropos que se echan en Extremadura a este manjar. El precio y la consideración de producto elitista y para ocasiones concretas, son los aspectos negativos, en los que coinciden todos los españoles.