La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Cáceres, Mari Luz Charco, decretó ayer el ingreso en prisión, sin fianza y comunicada, del joven neonazi Francisco Javier Lucas Verdejo, de 23 años, como presunto autor del apuñalamiento del ultraizquierdista Carlos G. Basas, de 21, en la madrugada del pasado viernes en la plaza Mayor de Cáceres. Según confirmó a este diario el abogado que le asistió de oficio, el imputado será juzgado "probablemente" por un delito de lesiones y no por un intento de homicidio. Ni la jueza ni el fiscal ofrecieron ayer información alguna sobre la calificación del caso ni de los detalles de la declaración de Francisco Javier Lucas, que duró cerca de tres horas.

Según el relato de los hechos ofrecido ayer a este diario por su abogado defensor, el joven neonazi sostuvo que en la madrugada del viernes coincidió alrededor de las 2.30 horas en la plaza Mayor con Carlos G. Basas, al que recriminó que hubiera dado una patada a un compañero suyo cuando entraba en un autobús urbano durante la manifestación de radicales del pasado día 15 en Cáceres. A continuación, y siempre según esta misma versión, ambos intercambiaron puñetazos y Basas quedó tendido en el suelo, pidiendo ayuda a otros jóvenes que estaban en el bar Berlín, en los soportales de la plaza.

El testimonio ofrecido por el joven neonazi antes de ingresar en prisión a mediodía de ayer pone de manifiesto que utilizó una navaja para pinchar a Carlos G. Basas "al verse acorralado" y que lo hizo "sin intención de herirle", ya que el ultraizquierdista "se abalanzó sobre él". Su abogado defendió ayer que Francisco Javier Lucas estaba recibiendo "una paliza por parte de unos diez jóvenes y que se asustó", motivo por el que sacó el arma blanca con el que hirió al otro radical. "Le estaban dando con palos y botellas. Ha sacado la navaja y ha levantado el brazo. El herido ni siquiera se ha dado cuenta de que se la había clavado", explicó el abogado.

"ABUSO DE ALCOHOL" En su exposición de los hechos, añadió que el presunto agresor iba acompañado por otros dos amigos, pero que éstos no le prestaron auxilio mientras estaba siendo agredido. Según esta versión, uno de los ultraizquierdistas le pidió a Lucas la navaja y, tras lograrlo, este mismo grupo de radicales continuó pegándole. "Ya le podéis dar una paliza", le dijo al resto. El enfrentamiento se desplazó después a la bandeja de la plaza Mayor, hasta donde el joven neonazi fue perseguido, quedando inconsciente hasta la llegada de las ambulancias y los agentes de policía.

La defensa del joven mantuvo ayer que éste "no pertenece a ningún grupo radical, aunque va con gente de extrema derecha". El presunto agresor también reconoció ante la jueza que esa noche "iba borracho porque había consumido alcohol en exceso" en bares de General Ezponda, cercanos al lugar donde se produjo el suceso.

Su abogado señaló que los jóvenes se habían cruzado "amenazas" en foros de internet tras la manifestación del pasado día 15 y aseguró que a Francisco Javier Lucas "le provocaron", sufriendo una "agresión brutal". La defensa del supuesto agresor pedirá la libertad provisional "dentro de ocho o diez días", aunque calculó que éste permanecerá un mes en prisión "hasta que se apacigüen los ánimos". "Que entre en prisión no es lo mejor, pero es donde más seguro está", subrayó ayer el letrado, que dijo que el joven "se encuentra animícamente mal y que aún no es consciente de lo que ha pasado". Durante su comparecencia ante la jueza, tuvo que ser atendido por el médico forense por espacio de 20 minutos "porque se mareaba", apuntó el abogado.

Sus padres permanecieron durante toda la mañana de ayer en los juzgados mientras duró la declaración. Visiblemente afectados, abandonaron el palacio de Justicia sin querer hacer declaraciones mientras su hijo era trasladado pocos minutos después de las dos de la tarde en un coche policial hacia el centro penitenciario de la carretera de Trujillo.

MEJORIA Por otro lado, el joven apuñalado seguía ayer ingresado en el hospital Infanta Cristina, en Badajoz, donde evoluciona favorablemente de sus heridas y ya ha sido trasladado a planta. Según el parte médico facilitado a mediodía ayer por el Servicio Extremeño de Salud, Carlos G. Basas está fuera de peligro y entubado en el tórax tras las heridas sufridas por arma blanca en el pulmón derecho y la mano derecha.

Ayer Izquierda Unida mostró su "enérgica repulsa" e indicó que "la defensa de los valores democráticos ligada al fomento de la convivencia, que en los últimos días ha sido alterada por acciones de grupos violentos de ultraderechas sin control". También mostró su preocupación por el suceso y exigió "un mayor control sobre las actividades de grupos de orientación neonazi", según Europa Press.