La clave para tapar algunos agujeros o marcharse de vacaciones al Caribe está detrás del 5. Es la terminación en la que los extremeños más confían para cumplir algunos de sus sueños. Y es que de ilusiones también se vive, al menos hasta el mediodía de hoy, cuando la suerte habrá repartido, a través de 85.000 bolas de madera y cinco cifras, un total de 2.320 millones de euros.

En cinco terminó el Gordo del sorteo de la lotería de Navidad del año pasado, que ha favorecido siete veces veces a Extremadura, seis a la provincia de Badajoz y una a la de Cáceres, y que lleva sin dejarse ver por tierra extremeñas 21 años. Quizá tenga algo que ver que los cacereños hayan acariciado el primer premio en menos ocasiones y lo ansían más. Al menos son los que más se han gastado de media en lotería, 73 euros frente a los 43 de los pacenses. Esto hace una media de 54 euros por extremeño, 16 euros menos que a nivel nacional.

El Gordo pasó de largo de Extremadura el año pasado, --el 32.365 se vendió en Barcelona, Soria, Alicante, Guipúzcoa, Jaén, Madrid, Ourense y Zaragoza--, aunque dejó un quinto premio de 750.000 euros y 2.443.500 euros del número posterior al agraciado con el segundo premio, que aunque no se vendió en la región, sí benefició a un buen número de extremeños, en su mayoría del grupo industrial Alfonso Gallardo. La administración número 1 de Jerez de los Caballeros vendió 1.810 décimos del 78.401 y repartió 2.443.500 euros, 1.350 euros por décimo.

La administración de lotería número 10 La Paloma de Badajoz también vendió 150 décimos del número 81.792, agraciado con un quinto premio de Navidad, con lo que repartió 5.000 euros en cada uno.

La última vez que el Gordo pisó tierras extremeñas fue en 1988, cuando recayó en Azuaga y Granja de Torrehermosa, en Badajoz. Si nos jugáramos la celebración de unas olimpiadas seguro que ya nos iba tocando, pero esto sí que es únicamente cuestión de suerte. Si la racha no se rompe, al menos viviremos unas horas la incertidumbre con la ilusión de todos los años. Una ilusión que podemos mantener hasta el sorteo de El Niño, que el año pasado sí pisó Extremadura.