La Junta de Extremadura concederá ayudas a la creación de empresas de inserción y a la contratación de trabajadores por estas sociedades, que dan empleo a personas en riesgo de exclusión social durante un periodo transitorio y como paso previo a su acceso a un puesto de trabajo normalizado.

La consejera de Igualdad y Empleo, Pilar Lucio, participa en Mérida en unas Jornadas sobre Empresas de Inserción, organizadas por el Sexpe, para dar a conocer este modelo de empresa, los procedimientos para convertirse en tal y las ayudas que la Junta está estudiando en la actualidad.

Son empresas cuyo objetivo es la incorporación de personas en riesgo de exclusión social -como mujeres paradas de larga duración con cargas familiares, jóvenes poco cualificados, ex reclusos y ex drogodependientes- como trabajadores durante un periodo transitorio y como paso previo hacia un trabajo normalizado.

Por el momento, ninguna empresa extremeña se ha apuntado al registro creado por la Junta -en proceso de calificación está el Grupo Cáparra-, aunque sí operan algunas de esta tipología que aún no están reconocidas como tal, dada que el registro se ha puesto en marcha recientemente.

Lucio destaca que las empresas de inserción constituyen "un buen modelo y muy experimentado", muy idóneo en Extremadura al hilo del Pacto Social y Político, en el que se prima la responsabilidad social de estas sociedades.

Las jornadas cuenta con la intervención de Nieves Ramos, presidenta de la Federación de Asociaciones Empresariales de Empresas de Inserción, que representa a 196 empresas de 12 comunidades autónomas, que dan empleo a unos 4.000 trabajadores.

La mitad de ellos son plantilla fija, encargada del funcionamiento de las empresas, y el resto trabajadores que durante un tiempo prestarán sus servicios en estas empresas en su camino hacia un puesto normalizado.

Ramos apuesta por la inserción de los colectivos en riesgo de exclusión social a través del empleo, para lo que se han puesto en marcha estas empresas con se rigen por los convenios del sector, no por becas, pagas o subvenciones.

Ofrecen empleo de calidad y con procesos de inserción pactados entre los trabajadores, las empresas y los servicios sociales, que son los que garantizan que el proceso de acompañamiento culmina en un trabajo en la empresa ordinaria.

En su opinión, estas empresas surgieron en un principio en el sector servicios, más concretamente en la recogida de basuras, pero posteriormente abarcaron otras áreas como el reciclaje, la jardinería y la mensajería, llegando a abrir nuevos yacimientos como el "catering".