Un presupuesto ejecutado al 70% en siete meses y 530 millones más de gasto que el año pasado por estas mismas fechas no son suficientes para que la oposición termine de ‘fiarse’. La consejera de Hacienda y Administración Pública, Pilar Blanco-Morales, compareció ayer en el pleno de la Asamblea para informar de la ejecución del presupuesto de este año, una información que se antojó «vital» para los grupos toda vez que ya están inmersos en la negociación de las cuentas del 2017. Blanco-Morales ofreció el mejor balance de los últimos cinco años, pero ni el PP ni Podemos se dejaron convencer.

Para los populares, los porcentajes están «maquillados y distorsionados por el efecto del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA)», mientras que la formación morada criticó que las únicas partidas ejecutadas casi o al cien por cien sean las que hacen referencia al gasto financiero. En este contexto, el PP, que el año pasado permitió con su abstención el «desbloqueo» de los presupuestos, exigió a la Junta un mayor grado de compromiso de cara al 2017 e insistió en la necesidad de «blindar» las partidas que se pacten para evitar que «se vacíen».

«La fiabilidad de la palabra dada está de manifiesto», replicó la consejera de Hacienda, que reiteró el compromiso de diálogo y transparencia de la Junta y volvió a tender la mano a los grupos para negociar las cuentas del 2017.

Blanco-Morales cifró en un 70% la ejecución del presupuesto a 31 de octubre, la cifra más alta desde 2011 a pesar de haberse aprobado en el mes de abril, y aseguró que en lo que va de año se han gastado 530 millones más que en el mismo periodo de 2015. Por consejerías, detalló que el presupuesto de Sanidad y Políticas Sociales está al 80%, el de Medio Ambiente y Políticas Agrarias al 68%, el de Educación y Empleo al 72% y el de Economía e Infraestructuras al 40%. «En siete meses hemos ejecutado más presupuesto que cualquier gobierno anterior », afirmó tajante.

LA OPOSICIÓN / Pero sus buenos datos no convencieron a PP y Podemos (la diputada de Ciudadanos no intervino en el debate), que acusaron a Blanco-Morales de «maquillar los porcentajes» y «retorcer las estadísticas». Ambos coincidieron al criticar que no se ha ejecutado «ni un euro» para el regadío de Tierra de Barros, los hospitales de Don Benito o Cáceres, la plataforma logística de Badajoz o las conexiones ferroviarias de los parques empresariales de Mérida y Navalmoral. También afearon al Ejecutivo que de los 19 millones contemplados para las ayudas a la creación de empleo únicamente se hayan gastado 10 o que de los 28 millones para las políticas de apoyo al autoempleo se hayan ejecutado 3,3. «Con estas cifras, ¿cómo son capaces de pedir planes de empleo al Estado?», echó en cara a los socialistas la portavoz del Grupo Popular, Cristina Teniente.

La diputada aseguró que los porcentajes de ejecución global están «distorsionados por el efecto del FLA» y acusó a la Junta de «sobreejecutar los gastos corrientes a costa de la inversión». «Hablar de ejecución no es solo hablar de porcentajes y de saldos de cuentas, sino de compromisos, de la palabra dada. Y decir que este presupuesto es récord en ejecución tiene trampa», aseguró. Por ello, Teniente insistió en la necesidad de establecer «garantías de ejecución y elevarlas a la categoría de ley» a través de una comisión de seguimiento que evite que las partidas «se vacíen» después con modificaciones de crédito. Y recordó que estas son «condiciones previas, necesarias e ineludibles» para su grupo en la negociación de cara al 2017.

Por su parte, el portavoz de Podemos, Álvaro Jaén, consideró que ese 70% podría ser «un buen dato», pero matizó que ha de analizarse con cautela porque no quiere decir que los gastos se hayan priorizado de forma correcta. «La única partida que está casi al cien por cien es el gasto financiero, frente al 33% de las inversiones o el 60% de las transferencias de capital», criticó Jaén, que también espera que de cara al próximo año pueda hacerse «un seguimiento periódico» a las cuentas en la Comisión de Hacienda.