Era previsible, pero ya es una realidad. El Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura acordó ayer, en sesión extraordinaria, suspender el plan de Navidad y volver al nivel de alerta 3. Según informó el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, la incidencia acumulada a los 14 días en la región es de 267,51 casos por cada 100.000 habitantes, superando así el límite al que había supeditado el Ejecutivo la decisión de dejar sin efecto el plan navideño. La medida entrará en vigor cuando se publique en el Diario Oficial de Extremadura.
En concreto, el consejero informó de que las reuniones se reducen de 10 a 6 personas como máximo, tanto en la hostelería como en los hogares durante todo el periodo navideño. En el caso de los encuentros familiares, sí se mantendrá el límite de 10 comensales en Nochebuena y Nochevieja. Por su parte, el toque de queda nocturno volverá a ser hasta las 12 de la noche todos los días, salvo el 24 y 31 de diciembre, que se ampliará hasta las 00.30 horas para volver a casa, en ningún caso para otro tipo de desplazamientos.
El cierre perimetral de Extremadura estará vigente entre el 23 de diciembre y el 6 de enero, pero solo se permitirá el desplazamiento para visitar a familiares (no allegados como se contemplaba hasta la fecha). Asimismo, cabe destacar que se mantiene el plan de Navidad para las residencias de mayores, por lo que se permitirán las visitas y salidas de estos centros.
Vergeles explicó que el aumento de los contagios que se viene registrando en los últimos días en la región es consecuencia del Black Friday y del puente de la Constitución, si bien «respecto al puente todavía no estamos viendo completamente su efecto». «La situación de crecimiento preocupante (de los contagios) se da en todas las comunidades y de forma progresiva verán cómo los gobiernos de las regiones van a adoptando decisiones en este sentido», señaló.
Tendencia al alza
En esta línea, el consejero aseguró que según la previsión del centro de alertas sanitarias, en los próximos días se produciría una «estabilización» en cuanto al nivel de contagios, no obstante, de acuerdo a los indicadores que manejan desde su departamento, la curva «va a seguir subiendo de momento», por lo que advirtió que hay que estar «preparados para esa subida».
El propio vicepresidente primero de la Asamblea de Extremadura, Miguel Ángel Morales, dio ayer positivo en coronavirus, por lo que la presidenta del Parlamento autonómico, Blanca Martín, guardará cuarentena hasta el 27 de diciembre al ser contacto estrecho, según informó la Cámara regional en nota de prensa.
«Navidades hay muchas, vidas solo hay una», subrayó Vergeles, quien destacó que los que actúan «de forma relajada» pueden provocar contagios e incluso el fallecimiento de sus seres queridos. El consejero justificó la adopción de las nuevas medidas en la necesidad de llegar a enero y febrero con la «población protegida», sobre todo las personas mayores de las residencias (grupo prioritario en la vacunación), y para que en los hospitales «se puedan realizar ingresos como consecuencia de los fríos del invierno que van a reagudizar algunas enfermedades».
El consejero reiteró que suspender el plan «puede tener efecto muy escaso si la ciudadanía no se pone las pilas», por lo que apeló a la «responsabilidad», ya que «está pagando el ocio controlado la irresponsabilidad en el ocio incontrolado». El plan comenzó a aplicarse el pasado lunes y se iba a extender hasta el 6 de enero.
