La Junta de Extremadura quiere que las matrículas en la universidad extremeña sean gratuitas. La administración regional y la UEx están estudiando la posibilidad de implantar una medida que ya funciona desde este curso en las nueve universidades públicas de Andalucía (también en países como Finlandia, Noruega, Dinamarca o Escocia) y que permitiría que los 20.200 alumnos extremeños de grado y máster que lo aprobaran todo solo tuvieran que pagar el primer curso en la universidad (salvo si tienen beca).

La exención o bonificación se haría en función de los créditos o asignaturas aprobados solo en primeras convocatorias (en junio o septiembre) pero no se aplicaría en aquellos créditos o materias en los que el alumno tenga que matricularse por segunda o tercera vez. «Pero hay que pedir un esfuerzo, no puede ser gratis para toda la vida, bastaría con que en primera matrícula sacasen un 5. Eso incentivaría a los estudiantes para que aprovechasen mejor el tiempo y también mejoraría el rendimiento», aseguró ayer el rector de la UEx, Segundo Píriz. Según las estadísticas, ahora solo tres de cada diez universitarios extremeños terminan la carrera en los cuatro años de media que dura un grado.

FUGA DE ALUMNOS / Pero además habría otras ventajas, como esquivar la fuga de extremeños a otras universidades del país y especialmente a Andalucía, donde la gratuidad puede convertirse en un reclamo importante -cada año se marchan de la región unos 2.000 alumnos extremeños de nuevo ingreso-. De esta forma, además, según indicó Píriz, se evitaría que se produjeran casos de abandono o situaciones límite de alumnos que no pueden continuar sus estudios por falta de ingresos e incluso llegar a embargos como al que tiene que hacer frente ahora una joven madrileña que pidió una beca préstamo del ministerio en 2010 para cursar un máster. «Hay un problema de base y es que la educación superior debe ser gratuita para todos los ciudadanos siempre y cuando cumplan unos requisitos míninos, pero no debe ser un privilegio. Tiene que ser un bien gratis como lo es la sanidad o la educación en las etapas inferiores y ese es un objetivo por el que debemos trabajar todos», señaló el rector. El máximo dirigente de la institución considera que es una buena medida, «de justicia social», y confía en que se irá extendiendo progresivamente por el resto del país.

Por su parte, la Junta de Extremadura ratificó ayer que se está llevando a cabo ese estudio pero no avanzó más detalles. Sí lo hizo Píriz quien habló incluso de que se podría implantar el próximo curso o el siguiente y que supondría un coste de unos cinco millones de euros, aunque «hay que afinar esa cantidad porque dependerá de los alumnos que aprueben en primera convocatoria». Y ese dinero tendría que salir de la Junta. «Los fondos que deje de ingresar la UEx como consecuencia del no pago de esa matrícula lo tiene que ver recompensado con una mayor aportación por parte de la administración regional, de lo contrario bajaría la calidad de la enseñanza».

EL SISTEMA ANDALUZ / El modelo que finalmente se desarrolle en Extremadura dependerá de la Junta, pero de entrada para el rector el sistema andaluz tal y como está diseñado «es una buena opción». El decreto aprobado en el 2017 para las nueve universidades públicas de Andalucía consiste en la bonificación del 99% de los créditos aprobados en primera matrícula. Se aplica tanto en grados como en másteres al alumnado que no cumple los requisitos para obtener la beca del ministerio (puesto que ya estarían exentos de pago) y en la práctica permite que aquellos estudiantes con buen rendimiento solo tengan que pagar la matrícula del primer año de universidad, dado que el sistema está vinculado a los resultados obtenidos en la carrera y no antes. A partir de ese primer año se deduce el 99% del coste de cada crédito aprobado para el segundo y así sucesivamente. En este curso, más de 76.000 universitarios andaluces se benefician de bonificaciones que suponen un total de 29 millones de euros.

HASTA 1.000 EUROS POR CURSO / Actualmente cada crédito en primera matrícula en la UEx oscila entre los 10 y 18 euros en función de la carrera (en cuartas y sucesivas matrículas llegan hasta los 111 euros). Teniendo en cuenta que un grado tiene una media de 60 créditos anuales, un curso supondría entre 600 y 1.080 euros. Siguiendo el sistema andaluz quien hubiera aprobado todos estos créditos en su primer curso en primera matrícula el año académico siguiente podría ahorrarse entre 594 y 1.069 euros según la carrera (el 99%). Y así el resto de los cursos. De tal forma, que si cumple ese rendimiento solo acabaría pagando el primer año de universidad (salvo si tiene beca).

De momento, la administración regional parece dispuesta a alcanzar esa gratuidad en los estudios superiores. Desde la Consejería de Educación recuerdan el «importante esfuerzo que la Junta está haciendo para apoyar la universidad pública extremeña en estos últimos tres años de legislatura». Destaca en este tiempo un aumento de 14,2 millones en la financiación de la UEx tanto en la subvención nominativa anual como en fondos destinados a mejoras de infraestructuras y la recuperación de la paga extra de su personal, y además subraya la implantación del pago de las matrículas hasta en diez plazos, cuatro más.

También recuerda el esfuerzo que realiza para mantener los precios públicos de la UEx congelados y entre los más bajos de España, lo que hace que Extremadura sea una de las tres regiones donde más barata es la enseñanza superior. Y añade otro impulso más: las becas complementarias que otorga la Junta son desde 2015 son «más justas» porque se flexibilizaron los niveles de renta. De esta se benefician 700 universitarios y suponen 1,2 millones.