Sacar dinero de un cajero sin pagar comisión puede comenzar a ser una misión complicada en muchas poblaciones extremeñas. Las entidades financieras han empezado a cobrar por la retirada de dinero de sus terminales cuando quienes lo hacen no son sus clientes y, en una comunidad como la extremeña, con una población muy dispersa entre pequeñas localidades en las que la oferta financiera es, si existe, muy reducida, esto supondrá que en la práctica se vean muy limitadas las posibilidades de extraer efectivo sin coste.

El último Anuario Económico de la Caixa revela que, de 181 poblaciones extremeñas con más de mil habitantes, en dos no hay ninguna oficina de depósito abierta al público, en 27 solo una y en 49 dos --aunque las oficinas no siempre disponen de cajero automático, es lo más habitual--. Entre todas ellas, suman más de un 40% de las localidades extremeñas. Solo 52 municipios (en la región hay 387) pasan de las cuatro sucursales. Eso supone que a partir de ahora, si no se es cliente de ninguna de ellas --o de aquellas con las que hayan podido alcanzar alianzas--, habrá que pagar cada vez que se extraiga dinero, con importes que llegan a los dos euros. "En el 2013 ya analizamos cómo podía afectar la reestructuración bancaria, con el proceso de concentración que se produjo, al ámbito rural extremeño, y este es uno de los temas de los que se avisó entonces que podría pasar", indica Ladislao Bermejo, coordinador regional de Adicae en Extremadura. Así que, "aunque el tema de las comisiones es generalizado, se les cobra a todos por igual, posiblemente afectará más a quienes menos oferta tienen para elegir en su localidad". Al fin y al cabo, apunta Bermejo, para quienes viven en ciudades el precio a pagar será darse "un paseo hasta donde este su cajero electrónico, pero habrá gente que lo tenga a 30 o 40 kilómetros"."O eres cliente de la entidad que tienes en el pueblo o te tienes que desplazar", apostilla.

Según el Anuario Estadístico de la Banca en España (que no recoge datos de los bancos que surgieron a partir de las cajas de ahorro), a 31 de diciembre del 2014 había en la región 358 oficinas bancarias. 169 de ellas --prácticamente la mitad-- pertenecen a solo dos entidades financieras, Santander y BBVA. Ninguna ha firmado, al menos de momento, alianzas con otras entidades. Así que sus clientes solo podrán sacar dinero gratis de su red de cajeros. Y si bien estas son, junto con las de CaixaBank, las más extensas de España, no tienen presencia en la mayor parte de las poblaciones de la región. Si a Santander y BBVA se le suma la red de Banca Pueyo (98 oficinas), se roza el 75% de la capacidad instalada.

Igualmente elevada es la concentración en el sector CECA --el que tiene su origen en las cajas de ahorros--. De un total de 495 oficinas, también a 31 de diciembre del 2014, 210 de ellas corresponden a Liberbank (participada por Caja Extremadura) y 128 a Ibercaja Banco (Caja Badajoz). Sin embargo, en este caso la situación es algo mejor, ya que en ambos casos se ha llegado a acuerdos para reducir --en ocasiones, eliminar-- las comisiones en una red más amplia de cajeros, igual que han hecho las dos cooperativas de crédito extremeñas, Caja Rural de Extremadura y Cajalmendralejo. No así la Caixa, que cuenta con una importante presencia en la región, con 75 oficinas.

Laly Bermejo, de la Unión de Consumidores de Extremadura, incide en que el mapa final de las comisiones dependerá tanto "de los acuerdos entre las distintas entidades bancarias" como de "la política comercial que quiera llevar a cabo cada una de ellas hacia sus clientes, de si les trasladan o no la comisión y en qué parte" estas comisiones se cobran entre entidades, la dueña del cajero a la emisora de la tarjeta, y luego es esta última la que decide si se la repercute al cliente. Y, una vez con los datos en la mano, aconseja "saber dónde están los cajeros que nos van a cobrar menos comisiones", para evitar pagar en exceso. Además, agrega, a partir de ahora este deberá ser un elemento más cuando haya que optar por una entidad financiera u otra. "Habrá que poner encima de la mesa todas las comisiones que se le van a pagar a esa entidad, pero no solamente por el reintegro en efectivo fuera de sus cajeros, sino también otras comisiones como el mantenimiento de cuenta o el envío de correo que también hay que considerar", sostiene.

En esta misma línea, Ladislao Bermejo recuerda que "la normativa deja abierta la posibilidad de negociar con tu propio banco qué comisiones de otras entidades te van cobrar. Y eso es algo que el consumidor debe saber".

COBROS PROPORCIONALES Por otro lado, este responsable de Adicae hace hincapié en que los cobros que se apliquen por este servicio deben ser proporcionales al coste real de la operación. "En Adicae hemos calculado que, si eso fuese así, este tipo de comisiones debería estar entre 0,45 y 0,75 euros, con lo que posiblemente se pudiera justificar que las que están cercanas a los dos euros son desorbitadas. Es algo que tendremos que valorar cuando se clarifique el mercado". Por lo pronto, la próxima semana Adicae tiene la audiencia previa de la demanda que presentó contra la Caixa por las comisiones de dos euros que comenzó a cobrar en marzo pasado.

Ni desorbitadas, pero tampoco pactadas. "Sin llegar a fijar una comisión expresamente igual para todos, se parecen mucho entre ellas. Parece que quieren despistar a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Habrá que estar vigilantes", remarca.