El sargento primero José Antonio Madera, de Badajoz, casado y padre de un niño de 6 meses, forma parte del Cuartel General. Para él, el día a día "se vive bien". Es su cuarta misión en el exterior: "estuve tres veces en Bosnia y nos coge con experiencia". Si bien el país es diferente, su labor "no es muy distinta; se reduce a trabajar, un poco de tiempo de ocio y pensar en la familia, que es lo que más se echa en falta aquí", cuenta. Siente "nostalgia" por su hijo, "que dejé con 4 meses y veré con 9; no sé si me conocerá". Madera es maestro y ahora imparte español al personal de otras unidades y a intérpretes. El pasado domingo cumplió 36 años y lo celebró con su "familia de aquí", porque "tienen un detalle muy bonito, cuando cumples años te dan una tarta". En sus contactos con los libaneses, explica, "he comprobado que son gente amable". Situaciones difíciles "no hay; venimos preparados sobre la historia y situaciones que puedas encontrar, por eso no te sorprende nada en demasía. Y la brigada arrastra una experiencia de muchas misiones". A su familia le manda un mensaje: "Hablamos todos los días, pero decirles que los quiero; y a los compañeros, muchos recuerdos".