El consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, Juan María Vázquez, recalca que los brotes de lengua azul detectados al sur de la región "no tienen incidencia en la cadena alimenticia ni del hombre ni del animal gracias a los protocolos y precauciones" puestos en marcha por los propios ganaderos y el servicio de Sanidad Animal de la Junta de Extremadura. Según recoge la agencia Europa Press, Vázquez aclara hay afectadas 35 explotaciones agrarias, de las que tan solo dos tienen confirmadas muertes causadas por lengua azul, una en Montemolín con cinco bajas, y otras dos cabezas de ganado muertas en Fuente del Maestre. En las otras 33 explotaciones hay registradas cerca de 400 reses muertas, de las que se espera conocer la causa de la muerte a través de los resultados de laboratorio de los análisis realizados. Asimismo, el consejero recuerda que estos brotes se esperaban en Extremadura desde el mes de agosto, cuando desde la Junta de Andalucía se comunicaron los primeros casos, dado la situación limítrofe de las provincias andaluzas y extremeñas, pero se muestra esperanzado de que las medidas adoptadas de "repelentes y fumigación, y el las bajas temperaturas" contribuyeran a que el mosquito causante de la lengua azul deje de propagarse. En total en la región hay 4.200.000 cabezas de ovino y 300.000 de caprino que pueden verse afectadas por la propagación de la lengua azul, dado que otros años el serotipo de mosquito tenía un índice de mortalidad del 0,4 por ciento, y el que ataca este años, del serotipo 1, alcanza niveles del 1 por ciento de mortalidad.