El número de pacientes que tienen que esperar más de seis meses para someterse a una intervención quirúrgica se ha triplicado en el último año. Así lo revela la Memoria del Defensor de los Usuarios del Sistema Sanitario Público de Extremadura, un informe que señala que en estos momentos --los datos corresponden al mes de diciembre del 2004-- hay 2.720 pacientes en la lista de espera quirúrgica de más de seis meses, una cifra que un año antes, según la misma institución, era de apenas 800 pacientes.

Esto supone que si ya estuviese vigente la ley de tiempos de respuesta en la atención sanitaria especializada --actualmente en fase de tramitación parlamentaria--, Sanidad tendría que costear las operaciones de estos más de 2.700 pacientes en clínicas privadas, opción que contempla para los casos en los que la demora quirúrgica supere los seis meses.

El informe, que fue hecho público ayer por el portavoz parlamentario del PP extremeño, Javier Casado, confirma que las zonas de la región con más lista de espera quirúrgica son Cáceres y Don Benito, como ya publicó este diario a principios de febrero.

De hecho, el informe del Defensor del Paciente reconoce que hay un problema singular en la zona de Cáceres con las listas de espera en traumatología --"la causa más frecuente de reclamación ante esta institución"--, en Don Benito con las operaciones de sinus pilonidal --"con tiempos socialmente no aceptados"-- y en Llerena-Zafra en ginecología (espera media de 180 días).

PRUEBAS DIAGNOSTICAS La normativa sobre tiempos de respuesta también contempla una espera máxima de un mes en lo que se refiere a las pruebas diagnósticas antes de acudir al sector privado. Sin embargo, la Memoria del Defensor del Usuario sanitario constata que la demora media supera este tiempo en mamografías (197 días), ecografías (107 días) y resonancias magnéticas (104 días).

Ante estos datos, Javier Casado reclamó a la Junta un compromiso presupuestario específico para acabar con el "problema" de las listas de espera, así como la "agilización" de la tramitación parlamentaria de la normativa que regula los tiempos de espera. En esta línea, calificó de "antisocial" la política sanitaria del Gobierno regional y afirmó que el informe del Defensor del Usuario supone "un tremendo tirón de orejas a la política sanitaria extremeña". A su juicio, esta situación se debe "a una falta de compromiso y de capacidad". Por eso, reclamó al consejero de Sanidad, Guillermo Fernández Vara, que, al menos en este ámbito, "no apueste por la sociedad de la imaginación y sí por la sociedad de la solución".

RESPUESTA DE SANIDAD Por su parte, la Consejería de Sanidad y Consumo replicó, a través de un comunicado, que los resultados que se obtienen avalan "que la sanidad extremeña mejora cada día", al tiempo que celebró que el PP utilice los datos recabados por el Defensor de los Usuarios, una figura que rechazaron durante su puesta en marcha.

Por lo que se refiere a la posible demora en la tramitación de la ley de tiempos de respuesta, la Junta asegura que "si hay retrasos se deben a la actitud del PP, que ha presentado como enmiendas parciales las mismas propuestas rechazadas como enmienda a la totalidad".