Repostar este mes en Extremadura puede resultar hasta un 15% más caro que a principios del año. La subida de precios del barril de petróleo en los últimos siete meses ha situado el coste del combustible para automóviles al borde de los valores máximos alcanzados durante el pasado verano. De esta forma, el importe medio de un litro de gasolina sin plomo de 95 octanos en la región se ha situado este mes en 1,08 euros por litro, 14 céntimos más que en enero y solo dos céntimos y medio menos que hace un año.

Ante esta situación, llenar de gasolina el depósito de un coche de tipo medio --tomando como referencia una capacidad de 60 litros-- cuesta ahora hasta ocho euros más que hace solo siete meses. Y la tendencia, aunque de forma más suave, es extensible a otro tipo de combustibles. Así, en el caso del gasoleo, el encarecimiento ha llegado al 9% durante esta primera mitad del 2007, de forma que el litro de este tipo de derivado del petróleo alcanza ya los 96 céntimos en las gasolineras y poder llenar el depósito supone ahora desembolsar cinco euros más que en enero (ha pasado de 53 a 58 euros).

A pesar de todo, el combustible en Extremadura aún no ha llegado a los extremos del pasado verano, cuando el litro de gasolina se sitúo en 1,10 euros y el de gasóleo se estableció por encima de los 98,5 céntimos. Eso sí, si se echa la mirada atrás, resulta que repostar actualmente le puede salir hasta un 30% más caro que hace un lustro. Y es que desde el 2002 los carburantes han sufrido una escalada de precios hasta ir situándose en cifras de récord año tras año.

En cuanto al biodiésel, en estos momentos está a 0,95 euros en la región, donde se distribuye en un total de 12 estaciones (una en Cáceres y 11 en Badajoz).

Además, los incrementos registrados a nivel autónomico son superiores a los experimentados en lo que va de año en el conjunto del país. Como media, las estaciones de servicio venden ahora un 12% más cara la gasolina y un 6% el gasoleo.

Los datos del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, corroboran que el momento álgido de la escalada de precios vuelve a coincidir un año más con el inicio de las vacaciones de verano. Y, de nuevo, el motivo es la subida del petróleo en el mercado internacional. Esta misma semana el barril (unidad de medida de 159 litros) de crudo de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) ha alcanzado la cota inédita de 72,83 dólares, es decir, ha alcanzado su techo histórico, mientras que el de brent (el de referencia en Europa) ya está en los 78,4 dólares, tan solo 24 centavos por debajo de su cuota máxima.

Sin embargo, los precios del combustible en España se están conteniendo, según los expertos, gracias a la apreciación del euro respecto al dolar, por lo que las subidas se dejan notar con menor intensidad en el mercado europeo.

Además, el presidente de la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES), Juan Prats, en declaraciones a EFE, confía en que los precios comiencen a bajar a partir del mes de agosto ante el descenso de la demanda con motivo de la vuelta a la actividad escolar y el menor número de desplazamientos. Asimismo, recordó que el ciclo habitual de los precios de los carburantes alcanza su máximo en julio por las vacaciones.