Campos, caminos y vías de acceso a polígonos y fincas anegados, el agua acumulándose amenazante en la cuneta de las carreteras, y los embalses aliviando sus reservas ante la amenaza de que siga lloviendo intensamente en las próximas horas. Son las consecuencias de la borrasca que en los tres últimos días está barriendo Extremadura y que hoy, según han advertido desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y el Centro de Emergencias 112, puede dejar precipitaciones con registros de más de 40 litros por metro cuadrado en apenas 12 horas en las comarcas del norte y el sur de la región.

La intensidad de la lluvia ya dejó ayer algunos damnificados en la comunidad autónoma. Por ejemplo los agricultores de la finca El Rincón de la Vega, situado en el término municipal de Jaraíz de la Vera. Allí alrededor de cuarenta hectáreas de regadío se encuentran anegadas por la crecida del río Tiétar. Las abundantes precipitaciones registradas en la zona, junto a la descarga de agua realizada el jueves desde el embalse del Rosarito, han provocado la crecida de este afluente del Tajo y la inundación, una vez más, de explotaciones agrícolas próximas a la orilla.

No es la primera vez que ocurre y, por ello, los propietarios de las fincas afectadas manifestaron ayer su malestar con las administraciones, a las que acusan de no adoptar medidas eficaces para evitar que las crecidas afecten a sus terrenos.

En esta misma zona, el arroyo Goíno también formó una gran balsa en su desembocadura en el Tiétar y el arroyo del Molinillo, a su paso por la carretera que une Talayuela con Jarandilla, cubrió otros terrenos de cultivos del entorno. Ya en zona urbana, en Aldeanueva de la Vera, tuvieron que intervenir los obreros municipales para achicar agua en algunos inmuebles del casco antiguo, según informó el alcalde de la localidad, Raúl Amor.

HASTA LA CARRETERA También a primera hora de ayer y tras las intensas lluvias caídas durante la noche, el río Arrago se desbordó afectando a algunos accesos vecinales a las poblaciones de Huélaga y La Moheda, así como al polígono industrial de Moraleja. No obstante, en ningún caso provocó su aislamiento, ya que a lo largo de la mañana se pudo restablecer la normalidad en estas vías y en todo momento fue posible transitar por la

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