Apuesta por la agricultura sostenible. El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó ayer destinar más de 10 millones de euros en ayudas al sector del viñedo y la economía verde y circular, ayudas que se enmarcan en la «prioridad» del Ejecutivo autonómico de «dar un nuevo impulso a Extremadura», según explicó Fernández Vara.

Por una parte, se autorizó la convocatoria de subvenciones para el fomento de la economía verde y circular en la agricultura, con una dotación de 1,8 millones para el año 2019. Se trata de una nueva línea cuyo objetivo es propiciar ayudas para que se invierta en la mejora de las infraestructuras de las explotaciones y su rendimiento global, así como las condiciones de trabajo, el bienestar de los animales, la calidad de los productos o la eficiencia energética.

Como ejemplo de actuaciones subvencionables dentro de esta línea de ayudas, el Ejecutivo señala las instalaciones para hacer compost; instalaciones de tratamiento y revalorización de purines y estiércol; inversiones encaminadas a disminuir el consumo de agua en las ganaderías o la instalación de biomasa o biogás, entre otras. El volumen de inversión objeto de ayuda será de hasta 100.000 euros por UTA, con un límite máximo de 200.000 euros por explotación.

Por otra parte, Fernández Vara anunció la convocatoria de ayudas para la reestructuración y reconversión del viñedo, que contarán con un presupuesto de nueve millones de euros para los años 2019 y 2020, frente a los 7,4 de la anterior convocatoria. Serán de aplicación a los viñedos que se destinen a la producción de uva para vinificación y a actividades como reconversión varietal, reimplantación de viñedos y mejora de las técnicas de gestión de viñedos (concretamente al sistema de plantación conocido como «cambio de vaso a espaldera»).

Como novedad en esta nueva convocatoria se establece que, en los criterios de valoración, se tendrá en cuenta que los solicitantes tengan todas las parcelas de viñedo de su explotación inscritas como ecológicas o como Denominación de Origen. También serán prioritarias las parcelas a reestructurar que no hayan tenido ayudas en programas anteriores.