El Hostal California de Trujillanos no es el único local que reconoce incumplir la ley antitabaco. El primero fue un asador de Marbella cuyo dueño, José Eugenio Arias, colgó en los cristales del restaurante unos carteles que indicaban que se permitía fumar en su interior. Más tarde, en el municipio cordobés de Cabra, una cervecería anunció que tampoco aplicaría la ley puesto que el 90% de su clientela se declaraba fumadora. Después fue en Valencia donde la Policía Local multó al propietario de un restaurante por dejar fumar a los clientes. Casi al mismo tiempo, a un bar de Alicante se le imponía la primera sanción de 600 euros por el mismo motivo.