Mas de 675.000 extremeños, un 3 por ciento menos que en 2008, han acudido hoy a depositar su voto en los 808 colegios electorales repartidos por toda la región, en una jornada con buena temperatura, aunque algo lluviosa, y en la que no se ha registrado ningún incidente de importancia.

El político más madrugador ha sido el presidente del Gobierno de Extremadura, Jose Antonio Monago, quien se ha desplazado, acompañado de su mujer, a las 10 de la mañana a su colegio en Badajoz para depositar su voto.

Monago también estuvo acompañado de algunos dirigentes de su partido, como el secretario general adjunto del PP en la región, Juan Parejo, y el portavoz del Grupo Popular en el Parlamento, Luis Alfonso Hernández Carrón.

El presidente de la Junta, ha calificado la jornada como una "fiesta de la democracia" en un día que amaneció con intensa lluvia en la capital pacense, circunstancia que a juicio de Monago es "dinero caído del cielo para los agricultores, ganaderos y pantanos de la región".

La anécdota de la jornada, se produjo en Badajoz, cuando la Policía Nacional tuvo que ir a buscar a su casa a un vocal que había abandonado su mesa electoral, alegando que tenía que cuidar a sus hijos por estar su mujer ingresada en el hospital.

Poco tiempo después de que la policía le trasladase a la Mesa Electoral, volvió a marcharse por lo que el asunto ha sido trasladado a la Junta Electoral de Zona para que dictamine.

El coordinador general de IU Extremadura y cabeza de lista al Congreso por Badajoz, Pedro Escobar, también ha votado en la capital pacense, poco después de las 11 de la mañana.

El dirigente de IU, ha mostrado su deseo de que triunfe la democracia frente a los mercados, pues en Europa "parece ser que ya no son necesarias las votaciones para que haya cambio de gobierno" cuando, a su juicio, la política es la manera de resolver los problemas.

En la misma línea se ha manifestado el secretario general del PSOE de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que poco antes de las 12 horas, ha depositado las papeletas para el Congreso y el Senado, en su pueblo de Olivenza, en Badajoz.

Para Vara, los españoles tienen hoy una "magnífica" oportunidad para demostrar a los mercados que España es un país "maduro" y amante de la democracia en el que, "por encima de las ideologías, tenemos pasión por participar".