Los desempleados extremeños que procedan de un Expediente de Regulación de Empleo podrán recibir una ayuda de 10.500 euros si deciden crear una pequeña empresa o se constituyan como autónomos, con la obligación de mantener este puesto de trabajo al menos tres años. Esta subvención ha sido incrementada en 500 euros después de la modificación del decreto que regula las ayudas para el fomento del autoempleo, aprobada ayer por la Junta.

Se trata de una medida ya anunciada en el mes de enero por la consejera de Igualdad y Empleo, Pilar Lucio, de la que podrán beneficiarse un máximo de 120 personas este año, y que ayer volvió a exponer junto al resto de supuestos subvencionables, entre los que se incluyen ayudas para quienes se constituyan como autónomos de 10.000 euros para las mujeres desempleadas, para quienes residan en localidades de menos de 5.000 habitantes, así como para los emigrantes retornados. También hay ayudas de 7.500 euros en el caso de destinar la empresa a una actividad innovadora, y de 5.000 euros en caso de no cumplir ninguno de los supuestos anteriores.

También se ha modificado el decreto que regula el fomento del empleo en el ámbito de la Economía Social, con el fin de fomentar el cambio de figura jurídica de las sociedades de bienes a otras que les permitan concurrir a subvenciones por la contratación de trabajadores, de las cuáles están excluidas, con el objetivo de facilitar el aumento de las plantillas de estas empresas.

Las ayudas para quienes decidan dar este paso pasarán de 600 euros a 1.000 euros, que podrán recibir un máximo de 400 empresas de las casi 4.000 sociedades de bienes que actualmente hay registradas en la región. La consejera extremeña apuntó que estas modificaciones se deben a una adaptación de las ayudas establecidas en la región a las condiciones actuales del mercado de trabajo motivadas por la crisis económica.