Hasta el momento, la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales de la Junta no ha tramitado al amparo de la ley antitabaco ninguna denuncia por el consumo de cachimbas en restaurantes, pubs o discotecas de la región. Sin embargo, en 2018 sí se aprecia un repunte de las sanciones por incumplimiento de esta normativa por otras causas. El año pasado se interpusieron 172 denuncias (frente a las 158 del 2017) y se tramitaron 59 expedientes sancionadores en las nueve áreas de salud de la región (74 el año anterior). Tres de ellos fueron por vender tabaco a menores, 23 a establecimientos de venta no autorizados, 10 por carecer la máquina expendedora de tabaco del mando de activación, 52 por permitir fumar en lugares prohibidos (bares, cafeterías, gasolineras, etcétera), 63 a personas que fumaron en estos lugares y 21 por falta de cartelería informativa.
