Desde hoy viernes todas las farmacias tienen la obligación de dispensar las mascarillas quirúrgicas a 96 céntimos como máximo. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó ayer la resolución con el acuerdo alcanzado el martes en la comisión de interministerial de precios de los medicamentos que ha ajustado el importe máximo de venta de las mascarillas quirúrgicas. La medida trata de evitar una escalada de precios y garantizar el acceso de toda la población a los productos cuyo uso «se recomienda dentro de las medidas higiénicas para la prevención de contagios por el covid-19», recoge.

«Se ha actuado con mucha rapidez, sin valorar un periodo de transición en los precios y con poco diálogo con el sector. Pero es cierto también que nuestra distribución ha hecho un gran esfuerzo por adaptar los precios a esta situación», reconoce Cecilio Venegas, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Badajoz, Aún así, muchas boticas que buscaron acopio a través de distintas empresas con precios más elevados para prestar el servicio, deberán vender por ahora por debajo del precio al que compraron. «Y no habrá ningún tipo de compensación», según avanzaba ayer el presidente de los farmacéuticos cacereños, Pedro Antonio Claros.

La regulación afecta de momento solo a las mascarillas quirúrgicas (de venta solo en las farmacias) y a también los geles y soluciones hidroalcohólicas autorizadas de momento por la Agencia Estatal del Medicamento (AEMPS). No afecta a todas las soluciones de este tipo que hay en el mercado, solo a las marcas que han sido avaladas por al AEMPS y que son una decena según aclara Venegas. En estos casos, el precio máximo estará entre 0,021 euros el mililitro y 0,015 en función del tamaño del envase. Por ejemplo, uno de 100 ml costará desde este viernes 2,1 euros. Pero en base a eso, se podrán encontrar otros productos para ese mismo fin a un precio superior al fijado por Sanidad.

El BOE aclara también que en el futuro se intervendrá el precio de otros productos como las soluciones asépticas para la piel o las mascarillas higiénicas (las de tela, por ejemplo), una vez que se tengan datos los costes de fabricación.

Para colocarlas: de nariz a barbilla

El uso de la mascarilla en la calle persigue evitar la transmisión del virus a través de las vías respiratorias y especialmente a través de las gotitas de saliva al exhalar. La clave por tanto es que el protector cubra por completo la boca y la nariz, como recoge la Organización Mundial de la Salud en sus recomendaciones y también el Consejo General de Colegios de Farmacéuticos. «Es fundamental ponerla, quitarla y eliminarla correctamente para evitar que pierda eficacia y aumente el riesgo de transmisión», recoge la información en las boticas. En la viñeta se pueden ver algunos de los errores comunes que se cometen más habitualmente.

Lo primero, la higene

Lo esencial antes de tocarla es el lavado de manos con agua y jabón (o con un desinfectante a base de alcohol). Al colocarla, hay que identificar la cara interior, situarla sobre la cara y ajustar la pinza nasal si la tuviera. Luego se enganchan las gomas en las orejas o se anuda a la cabeza los extremos, según el modelo. Hay que asegurarse de que la mascarilla queda bien ajustada en la cara, con la parte superior cubriendo por completo la nariz y la inferior la barbilla y sin holguras en los laterales. Una vez ajustada, aconsejan no tocar la mascarilla en ningún momento, y en caso de hacerlo, lavarse las manos o desinfectarlas con el gel.

Cubrir boca y nariz

También se desaconseja colocarla en una posición ‘de espera’: en la frente o la barbilla, tanto durante como después de su uso, según las recomendaciones de la Asociación Española de Normalización, que fijó hace dos semanas criterios de uso en un grupo de trabajo con el Ministerio de Sanidad. Cuando se retire, se hará tocando solo las gomas o las tiras. Y después, de nuevo se lavan las manos.

¿Y los niños?

El Ministro de Sanidad, Salvador Illa, recomendó ayer el uso de mascarillas para las salidas que podrán hacer los niños la próxima semana. Sin embargo, como ya avanzó este diario las farmacias no disponen en estos momentos de protectores adaptados a las dimensiones de la cara de un niño y pasará un tiempo hasta que las haya con normalidad en estos establecimientos. Aún así, y para que los niños puedan salir protegidos, el Colegio de Farmacéuticos de Badajoz ha editado un video en el que explica cómo se pueden adaptar las mascarillas quirúrigicas de adultos para que puedan usarlas los niños. Según explica en él el presidente de este órgano, Cecilio Venegas, habría que hacer un nudo en el lado más próximo a la mascarilla en las dos gomas que permiten sujetarla en las orejas, con el fin de reducir la longitud de estas y también fruncir en mayor medida la mascarilla y que se adapte a la cara del niño. Otra alternativa es girar cada una de las gomas 180 grados al ir a colocarla en las orejas, con el mismo fin, En ambos casos recuerda que hay que tener precaución al manipularla para evitar contagios.