Las dos barras de combustible irradiado de la Central Nuclear de Almaraz que serán utilizadas para realizar ensayos en un laboratorio de la ciudad belga de Mol salieron el pasado 25 de septiembre y ya han llegado a su destino, según fuentes oficiales.

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) autorizó el 27 de julio a la empresa Express Truck, S.A. (ETSA) a hacerse cargo del transporte y se suscribió una propuesta de cobertura de responsabilidad civil por importe de 297,4 millones de euros.

El director de Relaciones Institucionales de la planta cacereña, Pedro Ayala, confirmó ayer que el transporte salió de Almaraz hace dos semanas, aunque no precisó la fecha concreta. El CSN insistió en su negativa a proporcionar datos sobre este transporte, altamente radiactivo, "por motivos de seguridad física", y se limitó a confirmar que se realizó una revisión del embalaje en el que iban las dos varillas y se comprobó que era el adecuado.

El órgano de control explicó que el ensayo de laboratorio forma parte de un proyecto de investigación sobre combustible nuclear que no está relacionado específicamente con las actividades de la planta cacereña y añadió que se trata de un proyecto de investigación abierto en el que toman parte otras entidades no vinculadas a la Central Nuclear de Almaraz.

Varios grupos ecologistas habían advertido que paralizarían el envío de material.