No por previsible el dato resulta menos doloroso: en noviembre las matriculaciones de turismos se desplomaron un 48,9% en la región con respecto al mismo mes del año anterior, pasando de 2.139 unidades vendidas a 1.093. Este descenso calca prácticamente el 49,6% contabilizado a nivel nacional, que es el segundo mayor desplome de la historia, tras el sufrido en enero de 1993. Así las cosas, las ventas de los concesionarios extremeños acumulan ya en lo que va de año una caída del 27,4% (de 22.314 vehículos a 16.181), según los datos facilitados ayer por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). Por provincias, en la de Badajoz se comercializaron 719 turismos (-46,7%) y en la de Cáceres 374 (-52,5%).

Más acusado aun fue el descenso experimentada en el segmento de los vehículos industriales, que en la provincia de Badajoz fue del 61,9% (113 unidades matriculadas) y en la de Cáceres del 65,6% (57 unidades), conforme a los datos de la patronal de los concesionarios Faconauto.

Estas cifras están avaladas por los establecimientos de la región, que no solo constatan una caída de las ventas, sino que también acusan un descenso de las operaciones de taller. Tanto es así que, según los concesionarios consultados, los despidos comienzan a estar a la orden del día. "Y puede ir a peor", advierten.

"Al margen del problema de la confianza y el incremento del paro, está que las entidades financieras han endurecido mucho las condiciones de crédito", apunta Luis Alviz, gerente de Santano Automoción, que comercializa vehículos Audi y Volkswagen en Cáceres y Plasencia. En su caso, asegura, la coyuntura no está afectando a su plantilla. "Por cada puesto de trabajo que se pierde en una fábrica, se destruyen cinco en establecimientos accesorios y concesionarios. Nosotros no hemos despedido a nadie ni tenemos intención", agrega Javier Martín, de Extredauto --Grupo Gedauto--, aunque dice conocer empresas del sector que ya han comenzado a deshacerse de mano de obra.

CRITERIOS DE COMPRA Pero no solo se vende menos, sino que también se vende diferente. Estas fuentes aseguran que los clientes buscan ahora vehículos rebajados, como son los seminuevos o los de kilómetro cero. Y además, retrasan y apuran al máximo los tiempos para las operaciones de mecánica. Ante eso, los concesionarios ofrecen incentivos y buscan mejorar las condiciones de crédito con las financieras.