La tarjeta sanitaria digital dará un impulso definitivo a la receta electrónica, que se encuentran en pleno proceso de implantación en las 680 farmacias que hay en la comunidad autónoma. A partir de ahora, la misma tarjeta que usa el médico para ver los datos del paciente y su historial clínico, recogerá el medicamento que le será prescrito, dando así fin al uso de las recetas en papel.

Esta utilidad reducirá drásticamente las visitas a la consulta del doctor por parte de los pacientes a quienes se les ha indicado un medicamento de larga duración cada vez que se les acabe el fármaco, puesto que la tarjeta incorporará toda la información relevante del tratamiento.