Extremadura registra en lo que va de 2004 un boom energético, al menos en lo que a presentación de proyectos se refiere. La parcela más dinámica está siendo la de las centrales de ciclo combinado, que utilizan gas natural y fuel para producir electricidad. En la región, cinco proyectos de este tipo han llegado ya, en mayor o menor grado, a manos de las distintas administraciones para su evaluación. Curiosamente, los cinco han elegido la comarca de Mérida para su ubicación y, si salieran adelante todos --algo improbable--, alcanzarían una potencia de generación de electricidad (3.200 megavatios) que casi duplicaría la de la central de Almaraz (1.900 megavatios).

El proyecto que presenta una menor potencia es de la empresa suiza ELG para La Zarza, con 400 megavatios. Las dos centrales proyectadas en Alange --separadas por sólo 500 metros-- son las de Hidrocantábrico (800 megavatios) e Iberdrola (también 800). La misma potencia que estas dos últimas tendría la central propuesta por International Power en Mérida. El quinto proyecto, el de Sevillana Endesa, aún no se ha concretado, pero hay que tener en cuenta que todas las centrales del país tienen una potencia mínima de 400 megavatios en estos momentos.

La Junta ha asegurado que no mantendrá ninguna postura oficial al respecto de estas instalaciones porque es competencia del Gobierno central (el Ejecutivo extremeño sólo informa positiva o negativamente sobre la incidencia medioambiental). Sí ha dejado claro, en cambio, que si Almaraz cerrase la comunidad cubriría sus necesidades energéticas con una central de 800 megavatios.