Un millar de ganaderos, según los organizadores, se han concentrado hoy ante la Presidencia de la Junta de Extremadura, en Mérida, para denunciar los "gravísimos problemas" que está causando la tuberculosis bovina en la región, donde hay más de mil explotaciones afectadas.
La protesta, en la que han participado ganaderos procedentes de distintas comarcas extremeñas, estaba convocada por La Unión de Extremadura, Ganaderos de La Vera y Ganaderos 2008, y a ella se han sumado integrantes de otras organizaciones agrarias como APAG y representantes del PP y de Podemos.
La secretaria general de La Unión, Florentina Mirón, ha reclamado mayor transparencia en las campañas de saneamiento ganadero y que se cambien los protocolos de actuación con respecto a la tuberculosis bovina.
Ha explicado que en la actualidad "se están sacrificando animales y cuando post mortem se le hacen los análisis se comprueba que son falsos positivos", a pesar de que la detección de la enfermedad en muchas explotaciones supone su "ruina" al conllevar la inmovilización del ganado y que éste tenga que ir directamente a un cebadero para sacrificio.
Ha indicado también que las "indemnizaciones son ridículas", pues son muy inferiores al precio real de mercado de los animales.
Mirón ha dicho que, mientras tanto, "están ciervos y jabalíes campando a sus anchas" e infectando a las vacas, por lo que piden que la Junta de Extremadura habilite medidas para el descarte de esa fauna salvaje.
La representante agraria ha insistido en que la prueba que se utiliza actualmente para el saneamiento ganadero de la cabaña bovina, la "gamma-interferón", "se ha demostrado que en el 80 por ciento de los casos no es fiable", por lo que habría que, a su juicio, habría que buscar otras pruebas más seguras, como ocurre en otros países como Alemania.
Ha precisado que hay muchas zonas afectadas actualmente por la tuberculosis bovina en Extremadura en las comarcas de La Vera o los municipios de Valencia de Alcántara, Montehermoso, Moraleja, Trujilla o Zorita, y que esto hace que la comunidad autónoma sea actualmente la más afectada por esta enfermedad.
Florentina Mirón ha indicado que las pérdidas totales por la incidencia de este mal en la región no se han calculado y ha especificado que éstas no tienen sólo que ver con los animales sacrificados sino con la inmovilización de éstos, que se determina en cuando aparece un solo positivo en al explotación.
En ese sentido, ha especificado que por cada animal sacrificado o inmovilizado se pueden perder 800 o 900 euros.
La responsable de La Unión ha explicado que, a pesar de las medidas contra la enfermedad decretadas en los últimos años, la situación no ha mejorado y sigue habiendo "repuntes", con afectación incluso del ganado caprino, lo que pone de manifiesto que las acciones llevadas a cabo hasta ahora no son las adecuadas.
Mirón ha señalado que con esta protesta pretenden ser recibidos por el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y ha precisado que si no es así, registrarán en la sede del Gobierno extremeño el manifiesto de estas organizaciones agrarias con sus reivindicaciones, entre las que se recoge también el ser incluidas en la Mesa de la Tuberculosis Bovina.
Uno de los ganaderos afectados, Agustín Ruiz, encargado también de la administraciones de fincas, ha explicado que en una de estas explotaciones, en concreto la del torero José Ortega Cano, salió el año pasado un caso positivo, lo les impidió llevar unos 30 toros que tenían preparados para sementales a Zafra y ocasionó unas pérdidas de entre 50.000 y 60.000 euros, a pesar de que posteriormente los análisis en el matadero determinaron que la vaca afectada no tenía la enfermedad.
