Más de la mitad del contingente de inmigrantes que podrán venir a la región con un contrato de trabajo estable se destinará a cubrir las vacantes de médicos especialistas en el sistema sanitario público. Así, del cupo nacional, compuesto, según ha determinado la Dirección General de Migraciones del Ministerio de Trabajo, por 10.575 trabajadores para este año, a Extremadura le corresponden 55 empleados, de los que 30 serán médicos.

Además, esta demanda de sanitarios se centra en la provincia de Badajoz, que usará todo el contingente (30 personas) en reclamar la presencia de especialistas. Según explicó un portavoz del SES, las especialidades demandadas son anestesiología, traumatología y radiología, que son las que presentan un mayor déficit en este momento, y están condicionando iniciativas como la generalización de la epidural o el descenso de las listas de espera.

Se da también la circunstancia de que Badajoz es la provincia española que más médicos ha solicitado, pues sólo otras dos Baleares (que ha pedido 2) y Guipúzcoa (que reclama 19) incluyen esta cualificación en sus demandas.

Respecto a Cáceres, la situación es más equilibrada y acorde con lo que ocurre en otros lugares. Así, se han reclamando cinco pastores, dos albañiles, cinco escayolistas, tres alicatadores, cinco operadores de grúa y cinco vigilantes, lo suma en total un cupo de 25 personas.

Además, mientras en la provincia pacense, en lo que se refiere a empleos temporales, no se ha demandado ningún trabajador, pese a las continuas quejas por la falta de temporeros, en la cacereña el contingente pedido para realizar trabajos eventuales en el sector agrícola es de medio centenar de personas. En este apartado, Huelva, con casi 12.000 temporeros; Lérida, con casi 2.000, y Valencia, con 1.200, copan el mayor número de demandas.