La representante lusa, Selma Pereira, fue la que más fuerte pisó sobre la pasarela de Moda Extremadura. Con una colección inspirada en Gaudí, la joven diseñadora logró imponerse --y ganar el premio de 3.000 euros-- a otros nueve finalistas que ayer mostraron de nuevo sus propuestas en el Auditorio del Complejo Cultural San Francisco de Cáceres. Entre ellos estaba la cauriese Rocío Córdoba, que obtuvo el premio a la mejor colección extremeña, con una propuesta en la que ha mezclado el siglo XVIII con los años ochenta.

"Tiene muchas posibilidades, es joven y le queda mucho camino por hacer", destacaba sobre la novel cacereña el diseñador y director de Moda Extremadura, Pedro Vargas, que recalcó además "el empuje" que ha supuesto unir el concurso y la pasarela en un mismo evento, por lo que probablemente repitan el mismo formato en la edición del 2008.

Para Vargas lo mejor de este concurso ha estado en el elevado nivel de los jóvenes que se han presentado, que han mostrado "una creatividad desbordante en todos los diseños".

Y esa creatividad tuvo que recorrer de nuevo la pasarela de San Francisco para que el jurado decidiera la propuesta ganadora, con lo que los nervios y la presión volvieron a planear por el auditorio en la mañana de ayer.

Tras conocerse el veredicto, la joven Córdoba, con el premio ya en la mano y los nervios aplacados se mostraba satisfecha con el resultado y sobre todo con el apoyo que ha recibido. "David Delfín me ha animado a que siga trabajando", destacaba.

De hecho, el diseñador malagueño y presidente del jurado destacaba de la extremeña poco después del certamen que "aunque el estilo que ella trabaja no es el que más me engancha de entrada, se le ve muy inquieta y con posibilidades", destacó Delfín, que reiteró además su intención de volver. "Si me invitan vuelvo, y si no con una de mis colecciones, porque este espacio me vuelve loco", afirmó en referencia complejo cultural cacereño.