La decisión del Gobierno de Castilla-La Mancha de derogar la orden que establece el cierre nocturno de 21 Puntos de Atención Continuada (PAC) después de que el Tribunal Superior de esta comunidad haya dado de forma cautelar la razón a los ayuntamientos que han recurrido la decisión por vía judicial ha reavivado la polémica en Extremadura. El presidente de la Junta, José Antonio Monago, aseguró ayer que el caso manchego no es aplicable a la clausura de las 15 urgencias rurales y la modificación de horarios en otras seis que se aplicó el pasado verano en Extremadura, pero lo cierto es que tanto el PSOE como IU exigen al Ejecutivo autónomico la reapertura de los centros mientras los vecinos de municipios como Madroñera retoman las protestas.

Monago explicó ayer que la situación de los PAC de Castilla-La Mancha no es extrapolable a Extremadura porque en la comunidad que preside Dolores de Cospedal los centros cerrados eran los principales de zona, mientras que en Extremadura son los accesorios. "En Castilla-La Mancha se acudió a los tribunales, como se hubiera hecho en Extremadura si los puntos de atención continuada (cerrados) de aquí fueran no accesorios", manifestó Monago. Sus palabras sin embargo fueron corregidas horas después por la Junta de Comunidades de la región vecina, que en un comunicado explicó que la orden que se acaba de derogar no cerraba ningún PAC, sino que cambiaba el horario de los que registraban menos visitas. "La orden no afectaba a centros principales desde el punto de vista del volumen de actividad, sino a los de menor frecuencia asistencial de toda la región", indicó. En cualquier caso, Monago ha recordado que la decisión sobre los centros extremeños "no es fija" y que se puede modificar en base al estudio que está elaborando la Consejería de Salud y Política Social.

Tras derogar la orden Castilla-La Mancha, las reacciones políticas no se hicieron esperar. El portavoz del Grupo Socialista en la Asamblea, Valentín García, indicó que "Cospedal, la Margaret Thatcher del país, ha dado una lección a Monago" y exigió la reapertura de los PAC de la región "de manera urgente e inmediata". García declaró que Cospedal, en lugar de cerrar los PAC por "las gónadas como Monago", lo hizo con una normativa y un decreto que ha sido recurrido por los alcaldes de los municipios afectados, a los que ahora la justicia da la razón. "Mientras tanto Monago sigue un año después con las urgencias cerradas, obligando a los ancianos a recorrer decenas de kilómetros por la noche cuando se ponen enfermos", denunció.

Por su parte, el portavoz del Grupo IU, Pedro Escobar, confió en que el Gobierno regional anuncie la reapertura de los centros de urgencias "lo antes posible" y ha recordado que IU presentó en el Parlamento una iniciativa para que se "repensara y estudiara" la propuesta de organización de la Administración.

NUEVAS PROTESTAS La reapertura de los PAC en Castilla-La Mancha también ha reavivado las protestas vecinales, que se retoman en municipios afectados como Madroñera. El próximo sábado, la casa de la cultura de la localidad será el escenario de una manifestación convocada por la Plataforma Ciudadana contra el cierre del Punto de Atención Continuada (PAC), informa Nieves Agut. La concentración será a las seis de la tarde e incluye una marcha hasta el centro de urgencias que terminará en la plaza del ayuntamiento. Allí se leerá un manifiesto y varios escritos en los que los vecinos expresarán su indignación por el cierre del servicio al tiempo que pedirán su reapertura.

Isabel Moza, portavoz de la plataforma, explica que está prevista la asistencia de vecinos de Trujillo, Herguijuela y Santa Cruz de la Sierra, así como de Cáceres y Mérida. Moza también aseguró que entre los habitantes de Madroñera "existe una gran indignación" desde el cierre del PAC y denunció que los vecinos "están totalmente desatendidos por las tardes y los fines de semana", que es cuando han dejado de funcionar las urgencias. De hecho, explica que ahora, cuando alguno de los casi 3.200 vecinos que residen en el pueblo necesita asistencia, tiene que trasladarse 16 kilómetros, hasta Trujillo. Un distancia larga a la que hay que sumar la problemática de la carretera, que registra un elevado índice de siniestralidad, según la portavoz.