El principal candidato a la presidencia del PP de Extremadura, José Antonio Monago, se mostró ayer a favor de la Refinería Balboa, si el proyecto cumple todos los requisitos legales y medioambientales, por la situación de crisis económica y porque fue un asunto "juzgado" en las elecciones municipales del 2007. Monago imprime así un cambio de rumbo respecto a la tesis contraria al proyecto defendida por el actual presidente popular, Carlos Floriano.

"Con la que está cayendo en Extremadura, no estamos precisamente para poner freno" a proyectos empresariales, dijo Monago, a pregunta de los periodistas, en la rueda de prensa que dio como portavoz adjunto del PP en la Asamblea de Extremadura para hablar de empleo.

El candidato popular planteó que "a lo mejor" hubiese sido preferible montar la refinería en otro sitio, pero recordó que su partido defiende la libertad de empresa y los promotores, que son los que arriesgan su dinero, han apostado por una ubicación.

El PP, además, añadió, no puede ir contra la "seguridad jurídica", si el proyecto tiene todos los parabienes legales.

Sobre este cambio de postura en el PP, Monago dijo que es un síntoma de "madurez política". Monago añadió que, como ha hecho el PSOE en otros asuntos, como la OTAN o las nucleares, un partido puede "replantearse" determinadas cuestiones "sin perder su esencia".

Monago recordó la factura que tuvo que pagar el PP en Alconera por oponerse a la cementera, ya que tuvo que reconstituir el partido y ahora socialistas y populares están a favor.

En Villafranca de los Barros, el no del PP a la refinería le dio solo tres concejales, mientras el PSOE obtuvo mayoría absoluta. Monago criticó, asimismo, la presión a la que es sometido el alcalde villafranqués, Ramón Ropero, por parte de Refinería No.