La onda expansiva que ha provocado la saga literaria de Harry Potter no solo ha llegado al cine o a la propia literatura. También el teatro infantil aprovecha las reminiscencias que el sonido Harry Potter puede provocar al público. Es lo que ha hecho la compañía canaria Marimba en su espectáculo ´El niño que quería ser Harry Potter´. Este grupo fundado en 1985, especializado en marionetas, ha montado 15 espectáculos. En la obra que presenta el domingo en Mérida cuenta la historia de un niño que quiere ser mago. Durante la noche, entra en el Mundo de los Sueños.