Con motivo del Día Internacional de la Educación que se celebra hoy, la organización de mujeres rurales Fademur recuerda que en el mundo rural existe una grave falta de recursos relacionados con la enseñanza. Esto provoca, entre otras consecuencias, la emigración de su juventud a las ciudades, el retraso del mundo rural en innovación, la marcha de familias jóvenes y, en definitiva, es una causa más del despoblamiento. Por eso, Fademur pide un plan nacional de educación en el medio rural. «El cierre de un colegio se escribe como la crónica de una muerte anunciada: todos los vecinos y vecinas saben que cuando la hija de uno o el hijo de otra cumplan cierta edad, todo se habrá acabado. Es indignante que la Administración solo tenga en cuenta el número de alumnos a la hora de proporcionar este derecho básico de la población rural», lamenta Teresa López, presidenta de Fademur. En su opinión, habría que cambiar este criterio y fijarse en aspectos como la calidad de la enseñanza o el factor determinante que puede suponer el colegio o instituto para la pervivencia de un pueblo.