Las conversaciones que Caval mantenía con 16 entidades financieras para renegociar las condiciones de la deuda de 20 millones de euros se han roto a la espera de un posible acuerdo con Coenca. Si la salida de los 30 socios había puesto contra las cuerdas a la entidad, los socios son conscientes de que con esta nueva deuda casi millonaria, 940.000 euros, llegar a un acuerdo con las entidades financieras se torna imposible, de ahí que la solución pase por impedir la ejecución de la sentencia del pago al proveedor sevillano. "De lo contrario, llegaremos al concurso de acreedores porque no tenemos liquidez", asevera el secretario de la Junta de Caval, Juan Miguel Gasco.

La última oferta que se barajó en las negociaciones con las entidades financieras, destinar al pago de la deuda 10 de los 39 céntimos de euro que perciben de media por el kilo de fruta, terminó desechándose al implicar un compromiso de siete años. Esta opción fue trasladada y rechazada en la asamblea de socios, dado que "muchos de ellos son mayores de 60 años y no querían amarrarse tanto tiempo".